Clemencia para exconvictos de California en esta Navidad
Jerry Brown ha entregado más perdones a expresos del Estado que ningún otro gobernador
Algunos exconvictos piden perdón por sus adicciones, por los disparos hechos accidentalmente, o por haber manejado bajo la influencia del alcohol; otros culpan de su irresponsabilidad a su juventud o a la pobreza.
Sin embargo, el común denominador de todas las solicitudes de clemencia para el perdón de sus crímenes y que llegan al escritorio del gobernador de California, Jerry Brown, en cada Navidad es: piden una segunda oportunidad.
Cada año el funcionario y su equipo revisan cuidadosamente las solicitudes de clemencia, que les devolvería a los exdelincuentes algunos derechos que les fueron retirados cuando fueron condenados por un delito grave.
“La oficina del gobernador es muy clara cuando dice que [este perdón] es solo para las personas que pueden probar que han llevado una vida honrada por los últimos diez años”, dijo a KPCC Laurel Rosenhall, miembro de la organización sin fines de lucro Calmatters.
Agregó que para ello los solicitantes deben obtener de la corte un “certificado de rehabilitación”, que asegura que esa persona no ha tenido récord criminal durante ese tiempo. Luego ya se puede enviar la solicitud de perdón a la oficina del gobernador.
¿En qué consiste ese perdón?
Rosenhall comentó que hay dos maneras para iniciar la solicitud. “Algunos la piden directamente”, dijo. “Eso significa que son ellos mismos quienes escriben su solicitud y cuentan su propia historia“. Otros envían la petición a través de su abogado.
Cuando una persona es condenada por un delito grave, se pierden algunos derechos —aunque esa persona ya haya cumplido con su sentencia y esté en libertad. Esto incluye: poder votar, poseer un arma u obtener algunas licencias profesionales.
“Algunos complejos de apartamentos no les dan alquiler a personas que han recibido determinadas condenas”, dijo Rosenhall. “Ese perdón no borra el récord criminal pero sí restaura esos derechos. Por ejemplo [esas personas] pueden volver a ser miembros de un jurado o votar, etc”.
“Las consecuencias de un delito es como un murmullo entre la sociedad”, dijo a Calmatters el profesor de UC Davis, Gabriel J. Chin. “Si alguien cometió un crimen no puede alquilar un departamento u obtener licencias profesionales… se le hace más difícil mantenerse y estar lejos del crimen”.
Los perdones de Brown
La práctica de mostrar clemencia, que se demuestra al otorgar el perdón a los delincuentes en fechas festivas —y que había caído en desuso por el recientes gobernadores de California- ha regresado a ser una tradición en el Estado Dorado desde que Brown volvió al cargo desde 2011.
Solo en este periodo ha entregado 742, según datos de la oficina del Gobernador.
La representante de Calmatters comentó a KPCC que estos perdones eran comunes entre los gobernadores de California.
Pat Brown, quien fue padre del actual gobernador Jerry Brown y dirigió el Estado entre 1959 y 1967, otorgó 467 perdones. Su sucesor, Ronald Reagan, dio más de 500.
Sin embargo esta práctica comenzó a declinar a inicios de 1990 cuando las prácticas de lo llamado ser “duro contra el crimen” creció.
“Los tres últimos gobernadores han otorgado menos de 30 [perdones]”, dijo Rosenhall. “Brown es como un éxito de taquilla en esta área ya que ha entregado más de 700 perdones desde que volvió a ser gobernador en 2011. Es muy probable que anuncie más en esta Navidad”.
Brown fue gobernador de California por primera vez entre 1975 y 1983, cuando entregó 404 perdones.
Si bien es cierto que esta práctica declinó en décadas pasadas “Jerry Brown está trayendo de regreso la vieja escuela”, agregó Rosenhall.
El perdón y la Navidad
Estos perdones casi siempre se dan en la época de Pascua y en Navidad.
En la Pascua de este año, Brown perdonó a 59 personas, entre las cuales figuraban exconvictos con antiguos delitos de drogas, robos o fraudes.
Rosenhall cree que tal vez esto tenga que ver con la fe del gobernador.
“Jerry Brown es católico y cuando era joven fue un seminarista jesuita. Su fe se abre paso en la dirección de su liderazgo”, agrega.
Sin embargo, existe una tradición sobre autoridades gubernamentales para otorgar perdones en la época navideña.
Un ejemplo de ello se dio cuando el presidente de Estados Unidos Andrew Johnson, quien sirvió al país entre 1865 a 1869, proporcionó un perdón para aquellos que se rebelaron contra el país durante la Guerra Civil.
El perdón navideño se volvió más común, según expertos, entre el final de 1800 e inicios de 1900, cuando los funcionarios de las prisiones empezaron a hacer listas acerca de qué reos deberían ser liberados en esta época.
Desde entonces se hizo una práctica política en el país.