Abogado de migración y su esposa demandaron a reporteros y perdieron
Un colaborador de La Opinión estuvo entre los demandados
Un abogado de migración de Riverside y su esposa, que demandaron a varios reporteros que cubrían una protesta en su contra no solo perdieron los casos sino que tendrán que pagar los costos de defensa legal de los acusados.
Mireya Arias, la esposa de Rogelio Morales, abogado en migración, deberá pagar alrededor de $11,000 dólares a siete de sus demandados –entre ellos Alejandro Cano, colaborador de La Opinión– a quien el juez obligó a recompensarle $1,300 dólares para cubrir los gastos de su abogado Bryan Owens.
Todo comenzó a partir de varias demandas por discriminación de género que Morales entabló contra 11 negocios en Riverside y uno en Los Ángeles, básicamente peluquerías y tintorerías. La mayoría de los propietarios son hispanos. Cada una de las querellas era por alrededor de $50,000 dólares.
El litigante alega que los precios por los servicios cobrados a él y a Mireya Arias, son diferentes.
Durante 2016, la pareja Morales se dedicó a contratar los servicios de varios negocios para probar su teoría de discriminación por género.
Prácticamente, al día siguiente después de visitar un negocio, entablaba la demanda.
Protestas de comerciantes
Según reportó Alejandro Cano para La Opinión en julio del año pasado, decenas de empresarios y residentes de Riverside se manifestaron frente a las oficinas de Morales para protestar contra las querellas de presunta discriminación.
“Abogado Morales, yo gano mi dinero limpiamente, ¿y tú?; “Abogado Morales no somos tu plan de retiro”; “Abogado Morales, somos inmigrantes, no tenemos mucho dinero, lo que sí tenemos es coraje”, se podían leer en los carteles que llevaban los manifestantes, de acuerdo a lo reportado por Cano.
En la demostración, Eva López, dueña del salón de belleza Xotic Image de la ciudad de Riverside, explicó el modo de operar del abogado de migración: después de poner la demanda y que sus demandados reciben el aviso oficial, les llama por teléfono para tratar de llegar a un acuerdo monetario extraoficial.
“A mí me pidió 10,000 dólares para llegar a un acuerdo, dinero que no tengo”, le dijo López al reportero Cano. “Es una desgracia como abogado, y una desgracia para la comunidad hispana porque se anuncia como defensor del inmigrante cuando en realidad le está quitando dinero a los pequeños negocios”, añadió.
¿Demandas en represalia?
Después de estas protestas, la pareja Morales entabló siete demandas –entre ellas contra el reportero Alejandro Cano-; otra contra una reportera de una cadena de televisión y contra la abogada Rosa Elena Sahagún, a quien acusó de ser la líder de un plan para hostigarlo a él y a su esposa.
También demandaron a Frank Montes, líder de la Cámara de Comercio Hispana de California, ya que dijo es propietario de un taller y tiene acceso a varios vehículos para poder seguir a su esposa sin ser detectado.
La demanda contra Cano fue descartada por el propio abogado Morales antes de juicio, pero el juez determinó que debía pagar costos legales por el tiempo invertido en la preparación del caso.
Arias perdió todas las demandas restantes y en todos los casos representados por Bryan Owens, el juez le otorgó el pago de costos legales.
“Comprendo que la Corte considere que las demandas que mi cliente y yo hemos interpuestos son dudosas. Si ese el sentir de la corte, está bien”, dijo Morales en sus argumentos finales al concluir el juicio consolidado.
Las querellas contra los negocios de parte de Morales fueron con base a que hay una ley que no permite la discriminación de género. “En realidad lo que el abogado trata es intimidar a los negocios con las demandas para llegar a un acuerdo extrajudicial de pago y así evitar un litigio”, explica la abogada Sahagún, quien incluso solicitó y obtuvo una orden de restricción para protegerse de Morales debido a que éste la amenazó.
Hace ver que a los reporteros los demandó en represalia por la cobertura noticiosa.
Aquí no se acaba
Aunque el juez falló en contra de Arias en relación a sus demandas contra reporteros y organizadores, las querellas contra los comercios por presunta discriminación de género siguen su curso en los tribunales.
“Las demandas son por más de $50,000 dólares contra cada uno de los 12 negocios”, explica Sahagún.
Curiosamente, casi simultáneamente con las querellas, Morales abrió en Meet Up, el grupo Cómo ganar dinero poniendo fin a la trampa del género.