ICE decide liberar a mujer embarazada de un centro de detención inmigrantes
María Solís, de 28 años, fue detenida el pasado 1 de agosto por agentes de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) debido a que contaba con una orden de deportación por haber ingresado al país sin documentos n el 2007
La Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) autorizó hoy la liberación supervisada de una inmigrante embarazada que se encontraba recluida en un centro de detención en California, desde principios de agosto, confirmó su abogada.
María Solís, de 28 años, se presentó el martes frente a un juez de inmigración y ante el temor de que su embarazo de nueve semanas pudiera presentar complicaciones dadas las condiciones del encarcelamiento aceptó regresar voluntariamente a México.
No obstante, la sorpresa se dio hora y media más tarde, cuando la agencia migratoria le transmitió a su abogada que permitirá que su cliente permanezca en Estados Unidos en espera de que se resuelva su solicitud para una visa U, a la cual era elegible dado que fue víctima de violencia doméstica en su anterior matrimonio.
“El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) tiene discreción para analizar caso por caso, y ver si un caso amerita el uso de esa discreción para permitir que la persona permanezca en los Estados Unidos a pesar de una orden de deportación por parte de un juez”, explicó Leah Chavarría, abogada de María Solís.
“Ellos únicamente hacen esto en circunstancias muy excepcionales, María fue una de ellas”, agregó.
La abogada señaló que la inmigrante y madre de tres niñas ciudadanas estadounidenses podría ser puesta en libertad esta misma noche. “Estoy muy feliz por María y su familia que ha estado peleando por su liberación”, sentenció.
“Yo sé que su esposo, sus niñas y sus hermanos están muy tranquilos con el hecho de que ella podrá permanecer en Estados Unidos donde estará segura y donde recibirá un buen cuidado médico”, agregó Chavarría, quien dijo también sentirse algo frustrada de que les tomó seis semanas para obtener la liberación.
La detención
Solís, una inmigrante mexicana, fue detenida el pasado 1 de agosto por agentes de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) debido a que contaba con una orden de deportación por haber ingresado al país sin documentos n el 2007.
Desde entonces, había permanecido en un centro de detención en Otay Mesa, California, a la espera de la audiencia con un juez de inmigración.
La orden de liberación bajo supervisión se da un día después de que la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) enviara una carta a los directivos de ICE tanto en Washington como en San Diego solicitando la liberación de la mujer mexicana por temor a que presentara problemas de salud o inclusive un aborto.
A su vez, la comunidad inició una campaña en línea para recaudar firmas y demandar que la madre de familia regresara a casa.
Chavarría consideró que el apoyo y la presión tanto de la comunidad como de activistas pudo ser un factor a favor de la decisión por parte de las autoridades federales.
Bardis Vakili, abogado de ACLU en San Diego, dijo a Efe esta mañana que habían solicitado una explicación a autoridades migratorias del porqué Solís continuaba bajo custodia dado que sus propias políticas hablan de evitar el encarcelamiento de mujeres embarazadas salvo que existan “circunstancias extraordinarias”.
“Ella no tiene ningún delito, ninguna convicción, ella tiene familia y apoyo de la comunidad, ella no representa ningún riesgo”, declaró horas antes a la resolución.