Trump a “Dreamers”: “No tienen nada de qué preocuparse”
Declaraciones de Trump causan escepticismo debido a su historial de cambiantes opiniones
WASHINGTON—Antes de emprender un viaje a Suiza, el presidente Donald Trump dijo este miércoles que está abierto a la posibilidad de que ciertos “Dreamers” puedan tener una vía hacia la ciudadanía en un plazo de “diez a 12 años”, como parte de una solución permanente para “DACA” que incluya su muro fronterizo.
Durante una rueda de prensa improvisada, Trump dijo que los jóvenes amparados al programa de “acción diferida” (DACA) de 2012, “no tienen de qué preocuparse”.
Según explicó el mandatario, bajo el marco legal que la Casa Blanca divulgará el lunes próximo, las protecciones para los “Dreamers” se “transformarían” hacia una eventual ciudadanía.
“Va a suceder, en algún momento en el futuro, durante un período de diez a 12 años”, explicó el mandatario, antes de partir hacia un foro económico internacional de dos días en Davos.
Preguntado sobre qué mensaje le envía a los “Dreamers” que ahora se encuentran en limbo, Trump contestó: “Díganles que no tienen nada de qué preocuparse”.
El plan daría un estatus provisional a los 690,000 jóvenes amparados al “DACA” en la actualidad, y ese grupo calificaría eventualmente para la ciudadanía, según Trump.
Más adelante, un funcionario del alto rango de la Administración, que pidió el anonimato, se apresuró a explicar que la eventual ciudadanía de los “Dreamers” es tan solo “un punto de discusión” en el plan en ciernes, y que, en todo caso, éstos tendrían que reunir una serie de requisitos que no precisó.
Trump desmanteló “DACA” en septiembre pasado y dio plazo al Congreso hasta el próximo 5 de marzo para encontrar una solución legislativa permanente.
El año pasado, Trump prometió a los “Dreamers” una solución con “corazón”, pero su Administración ha tomado medidas policiales incluso contra esta población, por lo que sus declaraciones provocaron escepticismo.
En las agrias negociaciones entre demócratas y republicanos, Trump ha dejado en claro que no aceptará una legislación que codifique “DACA” sin componentes para el muro fronterizo y la seguridad en la frontera y el interior del país, y la eliminación de la “lotería de visas” y la “inmigración en cadena”, o visas para la reunificación familiar.
Además, en la mesa de negociaciones no ha habido participación de grupos cívicos del movimiento pro-inmigrante, solo de grupos ultraconservadores que piden “mano dura” contra los inmigrantes indocumentados y restricciones para la inmigración legal.
Las negociaciones han frustrado a los demócratas, endeudados con los “Dreamers” al punto que fueron acusados por Trump y sus aliados republicanos de provocar el reciente cierre del gobierno de tres días por escudar a “inmigrantes legales”, en detrimento de fondos para el Ejército y la seguridad nacional,
El Congreso se impuso un plazo hasta el próximo 8 de febrero para autorizar más fondos para las operaciones del gobierno, y ahora muchos demócratas están renuentes a forzar otra parálisis.
El líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, dijo que había ofrecido a Trump el viernes pasado apoyo a la financiación completa del muro fronterizo, a cambio de protección para los “Dreamers”, pero ayer retiró esa oferta de la mesa.
La Casa Blanca negó que Schumer haya hecho tal oferta. La Administración presentó el mes pasado al Congreso una propuesta de $33,000 millones para la seguridad fronteriza, de los cuales $18,000 millones se destinarían a la construcción del muro en la frontera con México.
Ahora, según la Casa Blanca, Trump quiere $25,000 millones para el muro y otros $5,000 millones para más seguridad fronteriza.
Optimismo cauteloso
En declaraciones a este diario, dos alcaldes de California, que participan en el cónclave de invierno de la Conferencia de Alcaldes de EEUU (USCM) en Washington, expresaron optimismo cauteloso de que Trump logre pactar un acuerdo para los “Dreamers”.
“Si el presidente está abierto (a la ciudadanía) eso sería algo muy bueno, porque es algo que tiene sentido común: si eres un Dreamer, si entraste a EEUU de pequeño, no hay razón para que no tengan estatus legal. No es bueno tener a dos clases de personas en el país“, dijo el alcalde republicano de Anaheim, Tom Tait, presidente del Grupo de Trabajo sobre Inmigración de la Conferencia.
“Tenemos que resolver el asunto de los Dreamers ya, tenemos un plazo pendiente… la Conferencia tiene una voz bipartidista en este tema”, dijo Tait.
Tait estuvo entre el grupo selecto de alcaldes invitados a una reunión con Trump en la Casa Blanca esta tarde, muchos de los cuales boicotearon el encuentro tras la nueva amenaza del Departamento de Justicia contra las “ciudades santuario”.
“Fui al encuentro porque creo que siempre es bueno escuchar. En esta ciudad puede que no escuchar al otro bando sea la norma pero no es bueno, la gente tiene que dialogar”, explicó Tait, que calificó el encuentro más como un discurso de Trump sobre infraestructura que un diálogo, porque éste no tomó preguntas.
Por su parte, Libby Schaaf, alcaldesa de Oakland, una “ciudad santuario”, señaló que es difícil creerle a Trump cuando tiene opiniones cambiantes pero confía en que se pueda resolver el asunto.
“ Yo confío en que será el Congreso el que resuelva este asunto, porque tienen el poder para hacerlo y darle a los Dreamers una vía permanente hacía la ciudadanía. Son jóvenes que pertenecen en este país, punto“, dijo Schaaf.
Sin embargo, en los pasillos del Congreso, no está claro que los demócratas acepten las nuevas condiciones, ya que han presionado por la inclusión de hasta 1,7 millones de jóvenes indocumentados.
El senador Lindsey Graham, republicano por Carolina del Sur y coautor del “Dream Act” junto al senador demócrata por Illinois, Dick Durbin, dijo que las nuevas declaraciones de Trump son una buena señal “de liderazgo presidencial sobre inmigración”.