Texas podría enviar a dos latinas al Congreso, tras primarias que rompieron récord
Los avances de los demócratas en Texas han causado nerviosismo entre los republicanos
WASHINGTON—Más de un millón de demócratas votaron en las primarias de Texas, superando su récord de 2002 e insuflando esperanzas de más victorias en los comicios de noviembre próximo, en los que dos latinas podrían ganar escaños en el Congreso.
Debido al crecimiento poblacional en Texas, donde los hispanos son un creciente bloque electoral, ambos partidos registraron una masiva participación en las urnas. Pero la cifra de los demócratas acaparó titulares porque es la primera vez que supera la registrada en las primarias de 2002.
Las primarias en Texas, un bastión republicano, sirvieron como un experimento de laboratorio para los demócratas, que intentan recuperar al menos una de las dos cámaras del Congreso en los comicios del próximo 6 de noviembre.
En declaraciones a este diario, Vanessa Cárdenas, analista y directora de comunicaciones del grupo “Emily’s List”, dijo hoy que las primarias dejaron en claro que las mujeres, tanto votantes como candidatas, “están liderando el cambio en nuestro país”.
“Más de un millón de demócratas, casi el doble del número de votantes en 2014, se hicieron presentes anoche. Para nosotros, lo más importante es que las mujeres continúan mostrando que son una fuerza imparable”, agregó Cárdenas, cuyo grupo promueve a candidatas de corte progresista en todo EEUU.
Según Cárdenas, todas las cinco candidatas que su grupo apoyó avanzaron a una segunda vuelta en mayo próximo o ganaron las contiendas, y tanto la jueza Verónica Escobar como la senadora estatal, Silvia García, “están a punto de convertirse en las primeras latinas de Texas que serán elegidas al Congreso”.
Cárdenas aseguró que las mujeres serán clave para que los demócratas recuperen la mayoría en la Cámara de Representantes en noviembre próximo, en el marco de una “ola azul” en la que las mujeres se están postulando y ganando contiendas, “y cambiarán nuestro gobierno”.
Texas, el segundo estado más grande de EEUU, ha sido tradicionalmente un estado “rojo”, o de tendencia republicana, pero el Partido Demócrata ha invertido millonarias sumas allí para plantar bandera. Los resultados de las primarias fueron causa de celebración para los demócratas, entre éstos el legislador demócrata por Texas, Julián Castro.
Two great takeaways from tonight's Texas primary:
— Julián Castro (@JulianCastro) March 7, 2018
1. Democratic enthusiasm is through the roof.
2. Female candidates sweeping countywide and legislative primaries across the state. #BlueWave2018 texas
We had 14 @runforsomething candidates on the ballot in Texas.
— Amanda Litman (@amandalitman) March 7, 2018
– 4 are moving on!!!
– 5 were unopposed in primaries but are up against horrific GOPers this fall.
– 4 ran great campaigns that came up short.
– 1 hasn't been called.
All in all, GREAT night for our team.
Según datos electorales oficiales, la participación de los votantes demócratas subió un 84% respecto a las primarias de 2014, mientras que la de los republicanos aumentó en 14% respecto a las de 2010.
Eso ha generado mucho entusiasmo, en particular entre la bancada demócrata, que quiere usar la agenda política del presidente Donald Trump como arma electoral noviembre.
Esos comicios definirán la totalidad de los 435 escaños en la Cámara de Representantes, 34 en el Senado, una treintena de gobernaciones, y centenares de puestos locales y estatales.
Entre los resultados más destacados de anoche figuran las victorias de Escobar en el distrito 16, de fuerte tendencia demócrata y que incluye a El Paso, y de García, del distrito 29, que abarca Houston.
Si continúan sumando apoyos, Escobar y García podrían ganar escaños en la Cámara de Representantes en noviembre próximo.
El grupo “America’s Voice” destacó hoy que aunque la meta de transformar a Texas en un estado “azul”, o demócrata, aún no se perfila en el horizonte, los demócratas sí están logrando avances en distritos clave.
Por ejemplo, en el distrito 23, representado por el legislador republicano, Will Hurd, los demócratas recibieron 13,000 votos por encima de los republicanos, lo que augura una de las contiendas más reñidas para ese escaño en la Cámara de Representantes.
Gina Ortiz Jones, una exoficial de inteligencia de la Fuerza Aérea, irá a segunda vuelta en mayo, en su lucha por desbancar a Hurd en noviembre. Si lo logra, sería la primera legisladora homosexual que represente a Texas en la Cámara Baja.
Mario Carrillo, director de “America’s Voice” en Texas, aplaudió en una declaración escrita la histórica participación en las urnas y las victorias de las latinas y demás mujeres minoritarias en el estado.
“Necesitamos más candidatas con valores progresistas que no tengan miedo a denunciar la intolerancia de la Administración Trump y que sigan apoyando a los inmigrantes” en Texas, dijo Carrillo, quien advirtió que los latinos necesitan aumentar su poder político.
Los demócratas registraron buenos avances y, aunque no al nivel que se planteaban, eso ha sonado las alarmas entre los republicanos en Texas, particularmente porque la política migratoria de Trump ha servido para movilizar el voto hispano.
Cruz "absolutely" concerned about increased Dem turnout in Texas primaries https://t.co/KArAlxj20p pic.twitter.com/MTudWkhdME
— The Hill (@thehill) March 6, 2018
Durante un programa de radio conservador de Hugh Hewitt, el senador republicano, Ted Cruz, dijo a su base que noviembre generará “una participación histórica de la extrema izquierda” y por eso no pueden “sentarse en sus laureles”.
“En Texas, si los conservadores nos quedamos en casa, si nos sentamos en nuestros laureles, podríamos ver que Texas se convierte en azul“, advirtió Cruz, quien afrontará en noviembre una férrea contienda por su escaño frente al legislador demócrata Beto O’Rourke.