El puma P-64 cruza las autopistas de Los Ángeles 5 veces en 2 semanas

El Servicio de Parques Nacionales ha documentado un raro caso de un puma de las montañas de Santa Mónica que cruza con éxito y frecuencia la carretera 101 de los EEUU, siendo la segunda vez en más de 15 años de estudio que sucede algo así.

Hay solo unos 15 pumas viviendo en las montañas de Santa Mónica, y los investigadores dicen que la pequeña población se está volviendo endogámica, lo que podría llevar a la extinción de la especie en sólo medio siglo. De ahí que Seth Riley, ecólogo de vida silvestre del Servicio de Parques Nacionales, se emocionara mucho cuando vio fotografías borrosas en blanco y negro tomadas por una cámara detectora de movimiento de un puma macho joven emergiendo de la autopista 101 cerca Liberty Canyon Road, a unos 35 kilómetros al oeste del centro de Los Ángeles. Y es que, aunque muchos pumas se acercan a la autopista, lo normal es que se den pronto la vuelta. “Esto te muestra lo buenos que son estos animales descifrando estas cosas”, exclamó.

Desde que el puma fue avistado al salir de la alcantarilla a principios de este año, los investigadores del Servicio de Parques Nacionales capturaron al que creen el mismo puma en la propiedad de Boeing en las montañas de Santa Susana y le pusieron un collar con un rastreador GPS. Desde entonces, P-64 ha cruzado el 101 tres veces más y ha pasado por debajo de la autopista 118 usando un túnel ecuestre.

Por supuesto, P-64 solo contribuirá a la diversidad genética de la población de las montañas de Santa Mónica si se queda y se reproduce (y, claro, si no es asesinado por algún vehículo o incluso otro puma). Desde que el Servicio de Parques Nacionales empezó a llevar la cuenta en 2002, dieciocho pumas han muerto en las carreteras.

Riley añade que el hecho de que un puma haya descubierto cómo usar la alcantarilla no significa que otros hagan lo mismo. La propia presencia continuada de P-64 puede evitarlo, pues estos animales se evitan mutuamente.

De cara a poner fin a la endogamia de la especie, se propone un paso elevado planificado de vida silvestre, pero, aunque Caltrans lo diseñará y construirá, la agencia estatal no lo financiará, con lo que los activistas ambientales están tratando de recaudar 60 millones para 2020 que costeen la construcción.