LAFC todo lo convierte en oro: gana su primer juego en casa gracias a un increíble error
Todo le sale bien al nuevo equipo de la MLS, que derrota a Seattle para redondear una jornada de fiesta en su bello estadio
Los Ángeles.- La buena estrella no abandona al LAFC en sus primeros meses de vida. Incluso un error del rival sirve para que la temporada de debut del nuevo equipo de futbol de Los Ángeles agregue otro momento memorable.
El belga Laurent Ciman, ayudado por el grave error del portero suizo Stefan Frei, anotó el primer gol en la historia del Estadio Banc of California, para que el LAFC ganara su esperado juego de apertura en casa 1-0 a Seattle Sounders la noche del domingo.
Frei llevaba una buena actuación, pero juzgó mal un potente tiro libre de Ciman a media altura al que el arquero le entró de mala forma y el balón se coló a los 93 minutos para hacer explotar el primer grito de gol en el bello estadio de Exposition Park.
El juego de apertura del LAFC en Los Ángeles fue una guerra en la cancha, con mucha entrega, y muchas patadas debido al arbitraje permisivo de Kevin Stott, quien dejó correr el partido, a veces demasiado. Se marcaron 27 faltas, pero con un juez más riguroso pudo ser el doble.
Pero el juego físico y a fondo no impidió que fuera entretenido. Los 22,000 aficionados que llenaron el estadio aportaron una sensacional atmósfera. Hubo oportunidades de ambos lados (14 tiros del LAFC, 13 de Seattle). Pero a la esplendorosa tarde angelina sólo le faltaba el gol y daba la impresión de que no iba llegar.
La jugada de la diferencia
Sin embargo, Carlos Vela tenía otros planes. No se dejó “ablandar” por las patadas que recibió y fue fouleado por enésima ocasión, esta vez por Cristian Roldán, cuando conducía afuera del área.
Iba a ser la última oportunidad del club negro y oro. El mexicano se perfilaba de zurda, pero fue Ciman –que ya había anotado en tiro libre contra Montreal– quien con mayor impulso disparó de derecha. La pelota entra siempre y cuando lleve dirección de gol, y este fue el caso tras el error infantil de Frei.
“No fue el mejor partido de ninguno de los dos equipos. Puede ser parte de los nervios del primer partido, de la emoción de jugar por fin en nuestra casa”, dijo Vela. “El equipo está demostrando que puede ganar partidos no jugando bonito”.
En cuanto el partido concluyó instantes después, Tyler Miller, el portero del LAFC, recorrió la cancha para ir a darle un abrazo a Frei. Buen gesto de un hombre que tuvo suerte de que dos pifias suyas no terminaran en goles de Seattle.
Miller fue el héroe del LAFC en el primer partido de su historia, a principios de marzo en Seattle, cuando LAFC ganó 0-1 con gol de Diego Rossi. El nuevo equipo ha ganado ahora cinco de sus primeros siete juegos en la MLS para 15 puntos. Un inicio de libro de récords.
Antes del gol, el LAFC estuvo muy cerca a los 83’ cuando el tiro libre del colombiano Eduard Atuesta fue peinado por el tico Marco Ureña y la pelota salió abajo besando el segundo poste.
A los 89’, el portero Miller soltó un largo servicio, dejándoselo en los pies a Gustav Svensson en el área chica, pero el tiro del sueco fue débil y Walker Zimmerman sacó.
Primero se salvaron
Luego de la emotiva salida al campo por parte de ambos equipos dio inicio el primer partido de una nueva era con oportunidades tempraneras para ambos cuadros. Un remate de cabeza de Alex Roldán, tras una mala salida del portero Miller fue salvado casi sobre la línea de gol por el defensor Steven Beitashour a los 7 minutos.
La respuesta unos momentos después del LAFC en una diagonal venenosa de Vela buscando el taconazo de Ureña no encontró las redes.
Pero el futbol se fue convirtiendo en una batalla en la zona central de la cancha; ambas escuadras endurecieron la pierna, como cuando el cubano Osvaldo Alonso le dio a Vela. Las colisiones llegaron de forma repetida, y varios de los jugadores se retiraron al descanso reclamándose o doliéndose.
Al final, una falta innecesaria de tantas marcó la diferencia. Y para los aficionados de Los Ángeles que atestiguaron en el estadio o que siguen al LAFC no podía ser de otra forma.