Gobierno falla en plazo para reunificación de niños inmigrantes; Cuomo presiona desde NY
Las autoridades federales cifaron en 711 el número de menores que no son elegibles
El gobierno ha entregado 1,820 niños a padres, familiares o allegados, pero mantiene en la incertidumbre a otros cientos de menores separados en la frontera con México cuyo futuro no quedó resuelto en el plazo del 26 de julio dado por un juez.
A través de un documento remitido ayer a una corte federal de San Diego, California, los abogados del Departamento de Justicia informaron que 1,442 menores indocumentados entre 5 y 18 años han sido devueltos con sus padres, los cuales se hallan bajo custodia de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE).
Otros 378 han sido liberados en “circunstancias apropiadas” -según el documento judicial- y entregados a padres que ya no estaban bajo custodia de ICE, o a algún otro familiar.
La cifra de 1,820 es inferior a los 2,551 menores mayores de 5 años que según una orden del juez Dana Sabraw tenían que haber sido devueltos con sus padres, tras ser separados de sus familias a consecuencia de la política de “tolerancia cero” hacia la inmigración ilegal.
En tanto, desde Nueva York el gobernador Andrew Cuomo, exigió ayer al gobierno del presidente Donald Trump información sobre los niños separados de sus padres que aún permanecen en el estado para ayudar a reunirlos con sus familias.
“Las instalaciones donde tienen a los niños están básicamente bajo una orden de silencio del gobierno federal, por lo tanto, aunque se encuentran en nuestro estado, no quieren darnos la información”, se quejó Cuomo, quien lideró una coalición multiestatal que ha demandado que el Ejecutivo detenga la separación familiar.
El gobierno federal había señalado con anterioridad que sólo 1,634 menores eran “elegibles” para la reagrupación ordenada por Sabraw, quien está a cargo de una demanda planteada contra las autoridades migratorias por la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU).
Sabraw, que esta semana calificó de “logro notable” el proceso de reunificación, ha citado para hoy viernes al gobierno y a los demandantes. Entre los temas sobre los que el magistrado deberá decidir está el pedido de ACLU de otorgar un plazo de siete días a los padres después de la reunificación, para que decidan si inician un largo y complicado proceso migratorio para quedarse en el país o regresan a sus naciones de origen.
Sabraw tendría que fijar además las bases para la reunificación de familias que hasta ahora no son consideradas elegibles. En el documento, el gobierno cifró en 711 el número de menores que no son elegibles de reunificación, entre los cuales figuran 431 hijos de padres que ya no están en el país y otros 120 menores cuyos progenitores han renunciado a ese beneficio.
“Claramente no se conseguirá una reunificación total, sólo pedimos que sea lo más rápido posible y de forma transparente. Nuestro objetivo es que todos los niños vuelvan con sus familias”, señaló el subdirector y abogado principal en esta materia para ACLU, Lee Gerlent, en una rueda de prensa previa a la entrega del escrito.
La organización insistió que las autoridades federales entreguen el listado de las familias reunificadas para garantizar la asesoría en el proceso migratorio.
“Las familias no han tenido la oportunidad de decidir qué hacer con su futuro, si continúan con el largo proceso de petición de asilo, qué harán con los niños en caso de que no puedan seguir juntos, es algo muy difícil de decidir cuando llevan separados varios meses”, comentó el abogado.
La Asociación Americana de Abogados para la Inmigración (AILA), señaló ayer en un comunicado que han presentado declaraciones juradas a la corte en las que indican que “se obligó a los padres a firmar sus deportaciones o se les hizo creer que se reunirían más rápidamente con sus hijos si aceptaban la expulsión”.
Según un informe del Departamento de Salud de Nueva York (DOH), aunque sean reunificados con sus padres, los efectos a largo plazo en los niños y sus familais serán permanentes y devastadores.