¿Por qué los vicegobernadores de AMLO asustan en los mandatarios en los estados?

MEXICO.- El futuro presidente de México prefiere llamarlos “delegados”, pero en la opinión pública mexicana reciben el nombrete de “vicegobernadores”, una figura que encabezarán los hombres de mayor confianza de Andrés Manuel López Obrador en cada uno de los 32 estados de la República.

Los vicegobernadores concentrarán en su persona el poder que hasta la presente administración tenían entre 30 y 40 representantes de diversas dependencias federales y son parte de un plan de austeridad para reducir el aparato burocrático en el próximo sexenio, pero su figura no ha gustado mucho a los mandatarios estatales.

El que dio voz recientemenrte a esa inconformidad fue el gobernador electo de Jalisco, Enrique Alfaro, al advertir  que “no aceptará” al delegado de AMLO porque quiere “una relación directa con el Ejecutivo Federal, mismo que pronto respondió:

“(El delegado) es un representante del gobierno federal y esta es una facultad que tiene el Presidente, que la voy a ejercer, no es algo que voy a crear”, advirtió. “No sé porque tienen tanto miedo “.

Pero más allá del tema de ahorro de dinero de la próxima administración pública, analistas politicos observan que los delegados o vicegobernadores sí tendrán un efecto de vigilantes pues quienes están previstos para ocupar los cargos son gente de su más cercano círculo, presidentes de Morena o postulados a cargos públicos en cada una de las entidades.

“Serán sus orejas”, resumió Gustavo Ruíz, analista de la Universidad Autónoma Metropolitana.

En una entrevista reciente, Roberto Pantoja, actual líder de Morena en Michoacán y designado por AMLO como uno de sus delegados estatales, describió  el cargo como una figura que buscará combatir la corrupción. “Seremos parte fundamental para hacer una limpieza en las instituciones de gobierno”.

Los gobernadores durante décadas han tenido rienda suelta para manejar a discreción fondos y recursos con la venia de los congresos.

Recientemente Pantoja se reunió con los integrantes del nuevo congreso local para revisar algunas cuentas.

En Jalisco quien tendrá este cargo será Carlos Lomelí, un empresario que apoyó a López Obrador desde su primera campaña presidencial en el año 2000 y fue el candidato de Morena a la gubernatura que peleó con Alfaro, quien protesta porque tendrá que lidiar con su otrora rival.

En otro ejemplo sobre el poder fiscalizador que tendrá AMLO a través de los delegados sería Oaxaca, donde se designó a  Nancy Ortiz. La actual presidenta de Morena en el estado ha sido ardua movilizadora de grupos indígenas en marchas y protestas en contra de actividades antidemocráticas y se prevé que dará batalla al priista Alejandro Murat, quien gobierna la entidad.

El politólogo Ruiz advierte que los próximos vicegobernadores, aunque tiene su lado positivo, podrían obstaculizar la fluida labor de los gobernadores o la encomienda podría encumbrar a personajes todopoderosos que de manera local pudiera corromperse o tomar ventaja para hacerse del cargo a futuro. “Habría que estar atento a esta figura”.