Activistas denuncian que Trump festeja a “héroes” de ICE mientras cientos de familias siguen separadas
La separación de familias se ha convertido en un tema electoral de cara a los comicios de noviembre
WASHINGTON— El presidente Donald Trump ha programado para el lunes próximo una “celebración” para rendir tributo a los “héroes” de ICE y la Patrulla Fronteriza, mientras activistas cívicos condenaron este viernes que su gobierno siga sin reunificar a más de 560 niños separados de sus padres.
Según datos oficiales que actualizó anoche la Administración Trump, aproximadamente 565 niños y jóvenes permanecen en albergues de la Oficina de Reasentamiento y Refugiados (ORR) del Departamento de Salud y Recursos Humanos (HHS), de los cuales 24 son menores de 5 años.
La Administración Trump sigue sin detallar sus planes para reunificar a niños cuyos padres ya fueron deportados y que, según las cifras del gobierno, totalizan 366.
La política de “tolerancia cero” en la frontera sur ha generado el rechazo de la comunidad internacional, pero la Administración aún sigue sin cumplir el último plazo impuesto por el juez federal en San Diego (California), Dana Sabraw, para completar la reunificación de familias. La orden de Sabraw obedece a una demanda de la Unión de Libertades Civiles de EEUU (ACLU), que impugnó la separación de familias.
The deadline for Trump to reunite the families he separated passed 22 days ago. It's inexcusable that hundreds of kids are still waiting. pic.twitter.com/dZD9WxqyOL
— ACLU (@ACLU) August 17, 2018
En cambio, la Casa Blanca confirmó una “ceremonia” el próximo lunes en el “Salón Este”, en la que Trump rendirá tributo a “los héroes” de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) y de la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP).
Activistas y expertos consultados hoy por este diario destacaron la insensibilidad de realizar la ceremonia.
Alex Nowrasteh, analista de política migratoria del Instituto Cato, afirmó hoy que “es prematuro que la Casa Blanca esté honrando a ICE hasta que el gobierno federal reunifique a todos los niños separados de sus familias”.
“ICE y otras agencias del DHS deben ser premiadas por cumplir con las leyes, no por razones políticas”, enfatizó Nowrasteh, quien ha criticado el manejo de la crisis migratoria en la frontera sur.
Por su parte, Tom Jawetz, analista del “Centro para el Progreso Estadounidense” (CAP), recordó que el juez Sabraw “ha dicho claramente que la Administración Trump cargará con la plena responsabilidad por cada uno de los niños que quedarán permanentemente huérfanos como resultado de su crueldad“.
“Espero que (el juez Sabraw) esté observando cuando la Casa Blanca realice esa insensible ceremonia”, agregó.
El jueves, durante una reunión con su Gabinete, Trump vaticinó que los demócratas saldrán perjudicados en las urnas al no respaldar su política migratoria, y agradeció la labor de ICE y los demás agentes policiales.
“Estamos trabajando para reducir los crímenes violentos y ayudar a nuestras grandes autoridades policiales, incluyendo los valientes hombres y mujeres de ICE, que han sido absolutamente abusados. Son personas tremendas”, afirmó Trump, añadiendo calificativos como “valientes”, “fuertes” y “buena gente”.
Desde siempre, Trump, miembros de su Gabinete, y titulares de ICE y otras agencias del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) han defendido las redadas y deportaciones como un esfuerzo necesario para resguardar la seguridad nacional.
El exdirector interino de ICE, Tom Homan, aprovechó cada foro público para condenar la “satanización” de los agentes de ICE que, según explicó, sólo cumplen órdenes y corresponde al Congreso modificar las leyes de inmigración.
Ronald Vitiello, nombrado por Trump para reemplazar a Homan, también ha defendido las acciones de ICE para fortalecer la seguridad en la frontera y al interior del país.
Carla Provost, quien la semana pasada se convirtió en la primera mujer en liderar la CBP, también se ha sumado al llamado de la Administración para que el Congreso elimine los “resquicios” legales que, a su juicio, alientan la emigración ilegal desde Centroamérica a EEUU.
Esos “resquicios” en realidad son las leyes y convenios internacionales que ha suscrito EEUU para proteger a inmigrantes que huyen de la violencia o persecución y solicitan refugio en este país.
Para activistas de la comunidad inmigrante, la celebración de Trump es una bofetada para inmigrantes que han sufrido abusos en los centros de detención.
Frank Sharry, director ejecutivo de “America’s Voice”, destacó que, tan solo en la última semana, varios agentes de Inmigración han afrontado numerosos cargos de violación, trabajo forzoso y otros abusos en los centros de detención y, desde luego, no deben estar en lista de invitados por Trump.
Además, varios solicitantes de asilo han permanecido en detención prolongada aún cuando reúnen los requisitos de protección en EEUU.
“En vez de utilizar a agentes de ICE y la Patrulla Fronteriza como telón para un mitin político por los comicios de mitad de término (legislativos), la Administración debería convocar una reunión de emergencia para cumplir con la orden del juez Sabraw, aconsejó Sharry.
Por su parte, el estratega demócrata José Aristimuño dijo que nada debe sorprender “de un gobierno que llama héroes a los oficiales de ICE y enemigos a los miles de inmigrantes que vienen a este país buscando el Sueño Americano”.
Trump pretende “armar un show político y politizar la situación migratoria en vez de asegurar la reunificación de los cientos de niños que siguen separados, sumiéndolos en la incertidumbre”, se quejó Aristimuño, presidente de la consultora NOW Strategies.
“No es el momento de estar celebrando una agencia gubernamental que lo único que hace es dividirnos y ejecutar una política antiinmigrante en nuestro país”, puntualizó.
Durante una audiencia ayer, Sabraw precisó que el gobierno puede continuar deteniendo a los padres junto con sus hijos en los centros de detención -pese a que el “Acuerdo Flores” de 1997 restringe las condiciones de detención de menores- a menos que estos declaren de forma “afirmativa” y “voluntaria” que están renunciando a los derechos concedidos bajo ese acuerdo.
Yesterday in Ms. L v. ICE, the judge clarified that @DHSgov can continue to detain reunited families. Detained parents have to choose between being detained with their children or being separated again. #FamilySeparation pic.twitter.com/Z0EPzql5Lx
— Sarah Pierce (@SarahPierceEsq) August 17, 2018
Según el gobierno, 154 padres renunciaron a su derecho de ser reunificados con sus hijos, pero la ACLU argumentó que muchos padres fueron “engañados” o “forzados” a firmar documentos que no entendían.
Sobre un tramo de la carretera interestatal “I-95”, un grupo de activistas colgó hoy de un puente una enorme manta con el mensaje: “Dejen de separar a las familias”.
La política de “tolerancia cero”, que generó la separación de más de 2,600 niños de sus padres en la frontera sur, se ha convertido en un tema electoral de cara a los comicios legislativos del próximo 6 de noviembre.