Cuándo es necesario evaluar asistir a hacer terapia familiar
Las terapias familiares son alternativas a las terapias individuales
Una terapia familiar es un tipo específico de terapia psicológica donde un núcleo familiar asiste a consulta con un psicólogo para tener una sesión donde sean liberados los problemas y las dudas de sus miembros, o donde ellos puedan expresarse libremente sobre lo que ocurre.
Las terapias familiares son métodos eficientes de tratar problemas dentro de la familia que los miembros no pueden resolver por sí mismos, ya sea porque no logran identificar el problema, o porque no cuentan con las herramientas verbales o emocionales para hacerlo.
¿Cuándo realizar terapia familiar?
Decidir realizar una terapia familiar no es un momento sencillo para el núcleo. En primer lugar, cuando se decide eso, se da por sentado de hay algo mal en el sistema familiar, algo que no funciona como debería y que debería ser reparado.
Esto puede despertar inquietudes, pero a medida que pasa el tiempo y la terapia, las familias se dan cuenta de que era una medida necesaria para solventar el problema de manera temprana y evitar su escalamiento.
Existen razones claras de que debemos asistir a terapia familiar con nuestros seres queridos, y algunas de ellas son las siguientes:
- Cuando hay personas excluidas en el sistema familiar, personas que no se integran correctamente.
- Una experiencia traumática de la que es muy difícil recuperarse.
- Violencia o síntomas de violencia intrafamiliares.
- Miembros de la familia con problemas de adicción.
- Cambio en el comportamiento en los hijos sea en la escuela o en la casa.
- Preparación para cambios trascendentales en un miembro del sistema familiar o de todo el sistema.
¿Por qué realizar terapia familiar?
Como adelantamos anteriormente, la terapia familiar puede ayudar a identificar problemas en el núcleo familiar y que no pueden solventarlos por sí mismos. Otras razones por las cuales hacer terapia familiar son las siguientes:
- Contribuye a la comprensión de funcionamiento del sistema familiar y cómo cada uno funciona individualmente.
- Ayuda a la identificación de miedos y ansiedades y al desarrollo de estrategias para abordarlos.
- Fortalecimiento del grupo familiar tanto como colectivo como de manera individual.
En definitiva, la terapia familiar siempre una herramienta que más allá de incomodar, ayudar a mejorar el desenvolvimiento y comunicación de toda la familia.