Video de seguridad filma a un hombre lamiendo un timbre por 3 horas
¿Qué hizo qué? ¿Se habían imaginado un hashtag "doorbelllicker"?
La policía de Salinas, California, está buscando a un hombre que fue grabado en una cinta de seguridad del hogar donde estuvo lamiendo el timbre de la puerta durante tres horas el sábado.
El hombre, a quien la policía identificó como Roberto Arroyo, de 33 años, fue visto en imágenes de seguridad lamiendo y frotándose la cara en el timbre de la residencia en la ciudad de Salinas, alrededor de las 5 a.m., informó el canal local de noticias KION.
La grabación también mostró al hombre “pareciendo aliviarse en el patio delantero”, dijo la policía a KION.
La pareja que vive en la casa estaba fuera de la ciudad, pero dijeron que sus hijos dormían adentro. No está claro cuántos años tienen los niños.
La policía todavía está buscando a Arroyo, y dice que podría enfrentar dos cargos menores por robo y por merodear, según KION.
La dueña de casa, Sylvia Dungan, describió su reacción cuando su software de seguridad para el hogar, creado por Ring, la alertó de la inusual actividad de la mañana, en la puerta de su casa. El sistema de seguridad de Ring envía imágenes de la cámara en vivo desde fuera de la casa del usuario, a su teléfono inteligente.
“Pensé, muchacho, hay mucho tráfico”, dijo Dungan a KION. “Voy, ¿a las 5:00 de la mañana? Mi hijo no llega a casa hasta las 6 de la mañana. Bueno, entonces, ¿quién diablos es este?”
Twitteó una foto del hombre el viernes, con el hashtag #doorbelllicker y la leyenda: “Acabábamos de instalar nuestro timbre de la puerta del anillo hace menos de un mes. Dio resultado”.
https://twitter.com/jaycat13/status/1081981405066711040
Miguel Cabrera, un oficial del Departamento de Policía de Salinas, le dijo a KION: “Nos sorprendió gratamente que la imagen fuera tan clara que no nos tomó mucho tiempo identificar al individuo”.
Añadió que la policía sabía quién era el perpetrador porque tiene antecedentes de delitos menores, como intoxicación pública, resistencia al arresto y estar bajo la influencia de narcóticos, según el New York Post.