Bandas vuelven a desangrar y extorsionar municipios mexicanos
Aterrorizan a políticos electos en municipios, ciudades y pueblos
MÉXICO – El método para extorsionar al alcalde de Coahuayutla, Guerrero, fue el mismo: amenazarlo de muerte si no entregaba dinero y cargos públicos; lo que cambió fue la reacción del munícipe Rafael Martínez quien se negó a pagar los $100,000 dólares mensuales que le exigían junto con el control de la Tesorería, la Secretaría de Seguridad Pública y Obras.
Para evitar que lo asesinaran, el edil huyó a un lugar desconocido para así trabajar a distancia con toda la torpeza administrativa que implica, sin embargo, la estrategia le costó cara a sus gobernados: en días pasados, un comando armado tomó la cabecera municipal para saquear, intimidar y robar a los vecinos del lugar quienes contraatacaron con armas. Una niña de 11 años murió y siete personas fueron raptadas.
Martínez se lo pensó dos veces para denunciar. Finalmente, en entrevistas telefónicas, decidió hablar y dijo que desde que ganó la elección de la alcaldía el gobierno de Guerrero sabe perfectamente lo que pasa en el municipio porque él “no ha hecho otra cosa” que denunciarlo con nombre y apellidos. Se trata de “Los Cornudos”, una banda liderada por un tal Flavio Delgado.
“No sé porqué no han respondido oficialmente y ni siquiera me han querido dar una audiencia con el gobernador Héctor Astudillo”, detalló.
“Lo que queremos es una estrategia conjunta o que nos asignen policías, porque no tenemos desde el año pasado cuando se pusieron en resguardo las armas”.
Las alcaldías se han convertido en un botín para los criminales que buscan dinero fácil. En los últimos 15 años han muerto de manera violenta alrededor de 150 presidentes municipales, , ex alcaldes o candidatos, según informes de la Asociación Nacional de Alcaldes y otras organizaciones así como cifras oficiales.
Hay varias razones, explica Alejandro Hope, analista de seguridad del Instituto Mexicano para la Competitividad. “Empezando por la política de descabezamiento puesta en marcha hace una década, los grandes cárteles se han partido en mil pedazos. Estas bandas no tienen contactos internacionales ni la sofisticación logística para operaciones importantes del tráfico de drogas. Pero tienen armas, hombres y mucha disposición para la violencia”.
Otra explicación es la vulnerabilidad de los gobernantes de provincia, una realidad presente en el día a día como bien quedó documentado en un video que se exhibió en redes sociales en 2017 cuando presuntos integrantes del cártel Los Rojos arrodillaron al alcalde de municipio de Mazatepec, Morelos, Jorge Toledo, para comprometerlo a entregarles unos $270,000 dólares.
Ese mismo año, la Asociación de Autoridades Locales de México exigió al gobierno federal un protocolo de protección para los presidentes municipales, que incluiría la instalación de una línea directa con la Secretaría de Gobernación, para que si algún edil se sintiera amenazado pudiera tener un teléfono directo con la dependencia. Nunca hubo respuesta.