Al rescate de las calles ‘olvidadas’ de Los Ángeles
Los Ángeles aprueba ordenanza para reincluir vías que no han tenido mantenimiento por décadas en su registro vial
El 2727 de Paradise Drive en la zona de Montecito Heights, un pequeño distrito en las colinas al noreste del centro de Los Ángeles parece un paraje campestre más que urbano.
El lodo todavía se acumula en la calle de tierra de donde se observan bellas vistas de la ciudad en un día claro de invierno.
Aunque ha estado “olvidada” por mucho tiempo, esta calle ahora ha sido “rescatada” y, una vez que lo apruebe el Concilio Municipal completo, volverá a ser parte del registro vial en la ciudad.
Por razones burocráticas, esta y 373 calles – muchas de ellas en colinas o muy cortas y sin salida – fueron “retiradas” de los registros de obras públicas, lo que impidió que fueran pavimentadas. En algunos casos, la falta de mantenimiento data desde hace ocho décadas.
Muchas de las calles fueron oficialmente “retiradas” del uso público desde la década de 1930, debido a la falta de fondos, ya que se consideraron inseguras o no se ajustaron al código apropiado, pero en su mayoría se dejaron abiertas al público para conducir o caminar mientras se se deterioraban.
“Es absurdo que tengamos calles en la ciudad de Los Ángeles que no han sido atendidas desde la Gran Depresión”, dijo el concejal Bob Blumenfield (Distrito 3) en octubre al presentar el problema en el Comite de Obras Públicas y Reducción de Pandillas del Concilio. “Ha sido injusto para las personas que viven en esas calles, que por todas las intenciones y propósitos se han utilizado como calles públicas, ser tratados como contribuyentes de segunda clase”.
El Concilio, en una votación de 10-0 en octubre del año pasado, aprobó redactar una ordenanza que revertiría todas las ordenanzas antiguas y otras reglas que han retirado las calles de uso, y abordará en el futuro las medidas apropiadas para aquellas vías que que pueden no ser apropiadas para uso público.
“Los constituyentes se contactan conmigo y dicen: ‘¿Por qué mi calle no ha sido pavimentada en 80 años?’ Y decimos: ‘Ese no puede ser el caso’, y lo investigamos y tienen razón: su calle fue retirada del uso público en la década de 1930’”.
Un informe de la ciudad solicitado por Blumenfield reveló que Los Ángeles tiene 374 calles que se han retirado del uso.
El problema
El informe encontró que múltiples ordenanzas y otras acciones del Concejo Municipal desde la década de 1930 han retirado las calles del uso público, y que, en general, esas ordenanzas autorizan y dirigen a la Junta de Obras Públicas a devolver las calles al uso público cuando se les considere seguras para transitarse.
Se colocaron señales en estas calles retiradas, pero a medida que pasaron los años, esas señales desaparecieron a medida que el desarrollo inmobiliaria se extendió a las colinas y las calles continuaron siendo utilizadas por el público que conducía sobre ellas.
Pero la Junta de Obras Públicas adoptó una política hace muchos años que exigía que las calles se construyeran según los estándares de la ciudad para determinar su seguridad, lo que llevó a que no se reconsideran para pavimentación, incluso a través de otras calles cercanas
Es posible que estas calles no cumplan con los estándares actuales de la ciudad, pero no se han retirado y siguen recibiendo mantenimiento regular.
El informe descubrió que la práctica pasó desapercibida durante décadas y que muchas de las calles retiradas todavía estaban en uso “aunque técnicamente están retiradas del uso público’’.
La decisión de retirar las calles se debió a un estatuto estatal que, desde entonces, ha sido derogado, según Los Ángeles Times, y estaba destinado en parte a prevenir reclamos de responsabilidad civil contra la ciudad por daños causados por calles defectuosas.
El costo a los conductores
Todo esto llega mientras en agosto del año pasado, un reporte encontró que manejar por las calles de Los Ángeles le cuesta a los conductores 2,995 dólares anuales en reparaciones de vehículos, accidentes, costos de la gasolina, y el tiempo perdido en los congestionamientos.
El análisis del grupo TRIP de Washington, D.C. reveló que en California, más de dos tercios de las principales carreteras locales y estatales (79% en Los Ángeles) están en condiciones mediocres o deficientes, lo que les cuesta a los conductores más de 900 dólares al año por la depreciación acelerada del auto, costos de reparación, aumento del consumo de combustible y desgaste de las llantas.
TRIP también descubrió que los conductores pagaron en promedio alrededor de 300 dólares por reparaciones de vehículos debido a accidentes en los cuales las características de la carretera probablemente fueron un factor contribuyente.