Hifu, arma eficaz contra la flacidez
Elimina rugas y flacidez de tu rostro con este novedoso método
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El ultrasonido focalizado de alta intensidad, HIFU por sus siglas en inglés, es un revolucionario sistema de rejuvenecimiento y modelación corporal no invasivo. Ofrece resultados comparables a los de una intervención quirúrgica en el tratamiento de arrugas, flacidez, líneas de expresión y adiposidad localizada.
Es el único equipo de estética aprobado por la FDA (Food and Drug Administration) para efectuar un lifting sin cirugía.
¿Cómo trabaja HIFU?
Los equipos de HIFU emplean energía ultrasónica concentrada en un haz de luz (efecto lupa) para trabajar profundamente en el tejido y crear miles de puntos de coagulación, sin generar daños a nivel superficial.
Las microlesiones causadas por HIFU son las que estimulan la remodelación del colágeno existente y la creación del nuevo. Los tejidos tratados comienzan a repararse y por ello es que la piel se empieza a percibir mucho más turgente, firme y nutrida.
Conforme avanza el tratamiento se obtiene el resultado lifting, pero a diferencia de la radiofrecuencia, el HIFU tiene la ventaja de provocar la retracción inmediata de la piel, neocolagénesis y elastogénesis a medio plazo.
El resultado final es un rostro rejuvenecido y vitalizado, con facciones totalmente naturales, por lo que no se nota que hubo intervención de la mano del hombre. Este es un factor determinante a la hora de elegir HIFU o lifting con cirugía, ya que este último si bien es efectivo, siempre se nota que la persona se sometió a un “estiramiento”.
Con HIFU se pueden tratar patas de gallo, arrugas peri bucales, surco nasogeniano, arrugas en la frente y lograr la ansiada definición del ovalo facial, siempre preservando las características naturales de la persona.
Esta tecnología también se usa en tratamientos corporales, ofreciendo grandes resultados en la reducción de medidas y tensado de la piel de abdomen, brazos, piernas, glúteos y cintura.
Por lo general se requieren de pocas sesiones para obtener buenos resultados, pero esto varía en cada caso ya que está ligado al problema a tratar, edad de la persona y estado de su piel.
Para los tratamientos faciales con HIFU, los mejores candidatos son quienes tienen entre 35 a 55 años, flacidez leve a moderada en cuello y mandíbula, cejas ácidas y mejillas laxas.
En el caso de los tratamientos reductores, se debe estar en el peso óptimo y tener panículos adiposos localizados no de gran tamaño.
Después de la sesión es posible retomar las actividades diarias sin problemas. Si bien la retracción de la piel es inmediata, el efecto de rejuvenecimiento comienza a verse pasados unos 4 a 6 meses de efectuado el tratamiento completo.
Cabe destacar que la aplicación de HIFU puede resultar bastante molesta, por lo que algunas personas requieren de cremas anestésicas para soportarlas.
Muchos profesionales de la estética corporal trabajan actualmente con equipos de HIFU, sobre todo los centros de más prestigio a nivel mundial. Por lo que si quieres quitarte algunos años de encima, no tengas dudas y consulta sobre este tratamiento y las ventajas que te ofrece.
