Joven estudiante y campeona de atletismo se queda sin hogar, su madre la abandona
De un día para otro su vida cambió, su madre les abandonó y ella tuvo que hacerse responsable de toda la familia
Un joven atleta de Arkansas está demostrando que la fortaleza es lo más importante para superar cualquier obstáculo.
Anya Sifuentes no solo se ha trabajado duro para convertirse en una estrella de la pista, sino que también se ha esforzado para superar un obstáculo importante en la vida: la falta de vivienda.
“Fue a fines de septiembre que las cosas empezaron a ponerse peor”, contó Sifuentes a CBS. “El 1 de octubre, regresé a casa justo después de la escuela, pero ya no pude entrar. Nos habían desahuciado.”.
El medio informativo mencionado no explicó por qué la familia de la adolescente perdió su casa, pero su entrenador de atletismo recuerda el día en que sucedió.
“Ella me llamó y estaba angustiada. Estoy sin hogar. No tengo ropa. No tengo adónde ir”, contó Jeff Smith, el entrenador jefe .
Anya Sifuentes tomó varios trabajos, encontró un departamento, comenzó a pagar facturas, y continuó yendo a la escuela y entrenando.
A Sifuentes no solo se le impidió volver a entrar en su casa, sino que su madre dificultó la situación.
“Mi mamá comenzó a actuar de manera extraña y se notaba que estaba atrasada en todas sus facturas y que ya no estaba actuando igual”, explicó Sifuentes. “Me dijo que no se iba a quedar con nosotros, que se iba”, añadió Sifuentes.
La adolescente se quedó sola para cuidar de sus dos hermanos y su sobrino. “Pensar que nos podían separar me dolía, no me gustaba la sensación de que eso pudiera suceder. Sabía que ya nada no iba a ser lo mismo”, son palabras de lo que sintió la joven.
Pero la fortaleza de la adolescente ha demostrado que no tiene límites. Ha superado uno de los golpes más duros para cualquier niño o adolescente y ni siquiera ha dejado de estudiar o entrenar.
“No sé si alguna vez he conocido a otro niño que pueda hacer lo que ella ha hecho y soportar lo que ha soportado y hacerlo con una sonrisa”, comentó el entrenador.
En casi un instante, pasó de ser una niña de secundaria normal a ser la cuidadora principal de su familia. Buscó empleo, encontró un nuevo apartamento y comenzó a pagar facturas, todo mientras asistía a la escuela y entrenaba.
Luchó por entender por qué su vida había terminado de esta manera. No sabía si encontraría la fuerza para seguir, pero logró perseverar.
“Establecí una meta en mi mente. Tengo una meta para ser feliz, aunque todo esto esté sucediendo y mi familia ya no parezca una familia”, dijo Sifuentes. “Estoy deprimida, estresada y la falta de dinero es abrumadora en este momento. Pero antes de hundirme pienso en que puedo superar todo este dolor”.
La adolescente afirma que el atletismo y Dios la ayudaron a superar los momentos difíciles. “Como dicen, estaba huyendo de miss problemas. Eso es lo que hice, correr”, dijo. “Literalmente me escapé de mis problemas. Incluso si eso significaba hacerlo 10 millas”.