¿Cómo y cuánta agua debemos beber al realizar ejercicio físico?
El líquido, aunque es vital para la vida deportiva, también es dañino si se ingiere en exceso
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La importancia de tomar agua cuando aplicamos rutinas de ejercicios, es crucial para que nuestro cuerpo no sufra deshidratación. Al ser 60% agua, nuestro organismo requiere recuperar lo que gastamos en sudor.
Además, pasar rato aplicando fuerza física genera cambios en la temperatura corporal, lo que amerita momentos de refrigeración para no sentir debilidad o mayor cansancio durante las rutinas.
¿Qué debemos tomar antes de hacer ejercicios?
Lo más recomendable es agua. También puedes comer un snack salado, como almendras o galletas, para que el sodio que contienen te ayude a retener el líquido.
Mientras haces ejercicios, en espacio de sesiones poco intensas que no pasan de 60 minutos, puedes tomar agua.
Si la rutina se prolonga o es muy intensa, se recomienda una bebida deportiva (o isotónica) con 6-8gr/100ml de carbohidratos y electrolitos, para que puedas reponer el glucógeno muscular.
Finalizada la rutina diaria de ejercicios, seguir tomando agua es suficiente. Solo si han sido ejercicios intensos, una bebida deportiva te caería bien. Esta vez que tenga minerales, como el sodio y el potasio, además de los carbohidratos.
Lo que debes evitar siempre es tomar líquido en abundancia, antes, durante y después de cada rutina. Esto podría producirte hiponatremia: trastorno que causa debilidad muscular, mareos y confusión, a causa de una baja concentración de sodio en la sangre que descontrola el funcionamiento del sistema nervioso.
El control de la cantidad ingerida es importante. Si cumples esto, podrás mantener una vida saludable con tus rutinas de ejercicios.
