¡De escándalo! Bayern golea 2-7 al Tottenham en la Champions
El delanteron Gnabry es la nueva estrella alemana, marco 4 goles
El Bayern de Munich dio un golpe de autoridad en su visita al campo del subcampeón, el Tottenham, al imponerse este martes por 2-7 al conjunto inglés, en un encuentro que alumbró el nacimiento de una nueva estrella, al atacante Serge Gnabry, autor de cuatro de los siete tantos del conjunto alemán.
En un partido destinado a convertirse en un duelo entre Harry Kane y el polaco Robert Lewandowsi, el protagonismo recayó, al menos de inicio, en los porteros Hugo Lloris y Manuel Neuer.
El guardameta francés del Tottenham evitó a los dos minutos un gol del conjunto alemán con una sensacional parada a un remate de Serge Gnabry y cuatro minutos después fue el cancerbero del Bayern el que evitó que se abriera el marcador con una fantástica parada al surcoreano Heung-Min Son.
Aunque los Spurs pegaron primero con tanto de Heung-Min Son, los bávaros mostraron rápidamente su carácter y en un arranque de orgullo puso tres minutos después la igualada con un espectacular disparo de Joshua Kimmich desde fuera del área.
Dos goles que no aplacaron la ambición de locales y visitantes, que siguieron buscando con ahínco la portería rival, en especial el Tottenham, que firmó ante los bávaros sus mejores minutos hasta el momento del curso.
Caundo los de Pechetino jugaban mejor llegó el polaco Robert Lewandowski, que no desaprovechó la primera oportunidad de que dispuso para poner al Bayern por delante en el marcador (1-2) con un gol en el último minuto del primer tiempo.
Después de esto llegó la fiesta de Serge Gnabry con dos goles casi consecutivos (53′ y 55′), en los que Gnabry evidenció toda su velocidad y precisión en el remate
Pero no se rindió el Tottenham, que soñó con la remontada tras acortar distancias a los 61 minutos con un gol de penalti (2-4) de Harry Kane.
Un sueño con el que se encargó de acabar Serge Gnabry, que se sumó dos nuevos tantos a su cuenta goleadora particular en los últimos siete minutos de juego, en los que el Bayern demostró su descomunal pegada ante un Tottenham ya con los brazos caídos.