A las autoridades del fútbol italiano les vale el racismo
Le aplican una multar irrisoria por el tercer caso de racismo
Atalanta recibió una multa de sólo $11 mil dólares por los cánticos racistas de sus aficionados, una cifra que refuerza la noción de que las autoridades del fútbol italiano no hacen lo suficiente para combatir el racismo.
El brasileño Dalbert Henrique, de la Fiorentina, fue víctima de las agresiones verbales con tintes racistas durante el empate 2-2 en el estadio de Atalanta el 22 de septiembre. El partido fue suspendido brevemente debido al incidente.
Pero este ya es el tercer caso de manera continua después de Romelu Lukaku, del Inter, y Franck Kessie, del Milan fueran objeto de burlas racistas durante las primeras cuatro jornadas de la Serie A.
El presidente de la FIFA Gianni Infantino arremetió recientemente contra las autoridades del fútbol de Italia por su pasividad.