¿Cómo identificar si tienes buena calidad de sueño?
Dormir bien mejora la concentración y tus reflejos
Al dormir, tu cuerpo entra en un reposo aparentemente absoluto, aunque la verdad es que el cerebro sigue activo. Sin embargo, el cuerpo necesita este descanso, la mente estará más fresca, tendrás energía y vigor, cosa que no sucede si tu calidad de sueño no es buena.
¿Cómo saber si duermes bien?
De acuerdo a QuieroCuidarme, en promedio, una persona adulta duerme unas 8 horas al día. Un niño puede dormir un poco más, entre 9 a 11 horas, mientras que una persona mayor duerme solo 6 horas. Y este promedio varía de acuerdo a cada tipo de persona.
Por eso, una manera de saber tu calidad de sueño es identificar si descansas el tiempo suficiente. Si tu promedio de sueño es de 5 horas o menos, entonces no estás descansando lo necesario, y ese puede ser el motivo para que no tengas un buen ánimo o incluso te enfermes.
Regularidad en el descanso
No es suficiente con dormir el tiempo suficiente. La regularidad también es importante. Esto implica no despertarte por las noches. Si esto sucede, el sueño se interrumpe y el descanso no es efectivo.
En estos casos, es posible que necesites algún medicamento para conciliar el sueño. Sin embargo, estos deben ser suministrados bajo prescripción médica. Y también es crucial que te hagas un horario fijo para dormir.
¿Te acuestas a altas horas de la noche?
Si tienes que levantarte a las 7 de la mañana, pero te acuestas a la 1 de la madrugada, tu cuerpo no descansará bien. Es posible que te levantes con sensación de cansancio y somnolencia.
Procura acostarte temprano. Por otro lado, no lleves tus problemas a la cama. Si te acuestas con preocupaciones será difícil que duermas bien. Para ello, puedes practicar algunas técnicas de relajación.
La alimentación también es necesaria para que tengas una buena noche de descanso. Si ingieres alimentos pesados, debes eliminarlos de tu dieta e ingerir alimentos más livianos para la cena.
El buen descanso es importante para la salud física y mental. Si duermes lo suficiente y descansas, serás una persona proactiva y tendrás las energías necesarias para afrontar todas tus actividades cotidianas.