El último deseo de un veterano de guerra deportado que agoniza en un hospital: regresar a EEUU
Sirvió en el Ejército de Estados Unidos durante la guerra de Vietnam, pero lo deportaron a México
Francisco Rodarte, veterano de guerra deportado. Crédito: Cortesía Ezekiel Ivy Tijeras
Un veterano de guerra que fue deportado a México y que se debate entre la vida y la muerte tras sufrir un derrame cerebral y un ataque al corazón habría pedido como último deseo regresar a Estados Unidos.
Francisco Rodarte, de 68 años de edad, fue miembro de un batallón de infantería del Ejército de los Estados Unidos durante la guerra de Vietnam.
En 1974 fue dado de alta de su servicio militar con honores, pero los problemas con la justicia en los que se metió después y por los que cumplió sentencia de cárcel provocaron que en el 2002 las autoridades de inmigración lo deportaran a México.
Deportado y en agonía
Rodarte era director de una casa de apoyo a exconvictos en Ciudad Juaŕez, más tarde se convirtió en pastor y se estableció en la ciudad de Querétaro, donde los últimos tres días ha permanecido conectado a un respirador artificial y en una cama de cuidados intensivos del Hospital General, desde donde le confió a uno de sus amigos ese último deseo.
Pocas son las probabilidades de que sobreviva, según han comentado familiares y amigos en las redes sociales al compartir el sitio de GoFundMe donde se piden donaciones para que los médicos le puedan practicar la cirugía a corazón abierto que necesita o para tratar de cumplir su último deseo en caso de que muera.
Al ser deportado, Rodarte no ha tenido acceso a los beneficios de la Administración de Asuntos de Veteranos (VA) mientras que el Seguro Popular de México no le cubre una cirugía mayor.
“En momentos como estos es cuando realmente podemos darnos cuenta que una deportación pesa como una sentencia de muerte“, señaló la organización Repatriate Our Patriots que aboga por el regreso a Estados Unidos de quienes han sido deportados a pesar de que sirvieron en las fuerzas armadas.
El último deseo de Rodarte fue regresar a Estados Unidos, aunque sea muerto, según escribió Ezekiel Ivy Tijeras, director de la Casa de Apoyo al Veterano Deportado en Ciudad Juárez y amigo del soldado en agonía.
