Las 6 variedades de quesos más saludables

El queso es uno de los productos lácteos de mayor consumo a nivel internacional. Es un alimento sólido que se obtiene de la maduración de la cuajada de la leche, una vez eliminado el suero. En la actualidad existen numerosas variantes de quesos, cada uno con diferentes características que se basan principalmente en su proceso de elaboración e ingredientes.

Es producto del que se tienen falsas creencias en cuestiones nutricionales, ya que es difamado por ser un alimento rico en grasas saturadas y sodio. Sin embargo existen extraordinarias variantes de quesos que son saludables debido a su aporte en nutrientes y minerales. Estos tipos de quesos se destacan por ser suaves y bajos en calorías, aproximadamente una porción de 60 gramos aporta cerca de 110 calorías ¡Nada mal! 

1. Queso mozzarella

El queso mozzarella es uno de las variantes italianas más populares, lo más destacado de esta variante es que se trata de un queso con muy poca maduración, sodio y grasas. Una de sus grandes peculiaridades es que es elaborado con leche de búfala, que se destaca por tener un mayor valor nutricional que la leche de vaca (normalmente contiene mayor aporte en proteínas, grasas y lactosa). Entre sus extraordinarias bondades nutricionales se le atribuye su contenido en riboflavina, tiamina, vacina, biotina y vitamina B6. Y es una magnífica fuente de calcio, ya que una porción contiene 200 mg de calcio es por ello un gran aliado para fortalecer los huesos. 

2. Queso suizo

Es una de las variantes más populares de quesos semiduros y una de sus grandes cualidades es que se elabora con leche cruda de vaca, sal, una pequeña dosis de cuajo natural, fermentos lácteos y sin aditivos, con maduración natural. Esta variante se destaca por ser su alto contenido en vitamina B12, que cumple una función crucial en el funcionamiento de las células, los nervios y los músculos. Una de sus grandes ventajas es que al ser elaborados con leche cruda, los vuelve más digeribles y amables para la digestión.

3. Queso parmesano

El queso parmesano es reconocido como uno de los productos de mayor calidad en el mundo y aunque no lo creas esta exquisita herencia italiana tiene muchos beneficios para la salud. Se destaca por su delicado proceso de elaboración en el que se utiliza leche fresca de vacas que nunca han sido alimentadas con productos secos y procesados. El original queso parmesano es un alimento rico en proteínas y grasas. También se destaca por su extraordinario aporte en vitaminas como las del grupo B y minerales como el calcio, zinc, cobre y fósforo. Al ser un queso añejado se destaca por contener un mayor aporte en proteínas y un menor contenido en grasas. Es un gran alimento para prevenir la osteoporosis y debido a su aporte en probióticos es fácil de digerir.

4. Queso cottage

El queso cottage es una de las variantes más recomendadas para bajar de peso, se caracteriza por su gran contenido en proteínas y bajo aporte calórico. Es una de las variantes más nutritivas y con menor aporte en grasas, también es uno de los quesos con mayor efecto probiótico gracias al proceso de fermentación que experimenta. Una de sus grandes peculiaridades es su alto contenido en selenio, que es un antioxidante clave que reduce la inflamación crónica. también es un buen aliado para fortalecer los huesos, reduce el riesgo de síndrome metabólico y mejora la salud intestinal. 

5. Queso ricotta

El queso ricotta se caracteriza por su textura suave, blanda y un sabor muy fino que lo vuelve un buen ingrediente para utilizarse en platillos salados y dulces. Entre sus principales cualidades se encuentra su bajo aporte en grasas y calorías. Es rico en calcio, proteínas y sobretodo un espectacular contenido en ácidos grasos Omega 3 y 6. También es popular ya que su alto contenido en proteína de suero le brinda un contenido especial en todos los aminoácidos esenciales. 

6. Queso de cabra

Este queso también pertenece a las variantes suaves y blandas, su principal característica es que se elabora con leche de cabra; la cual se destaca por contener menos partículas de grasa, es por ello una variante más fácil de digerir. También es un alimento con un gran poder probiótico que mejora la flora intestinal y el funcionamiento del sistema imunológico. Contiene bajos niveles de sodio, poca grasa y un alto contenido en proteínas; esta indicado para las personas que presentan intolerancias alimentarias por su bajo aporte en lactosa y caseína.