Jugadora del América dice que ella y su pareja, también futbolista, sí fueron secuestradas
Las involucradas fueron traspasadas a las Xolas de Tijuana
CIUDAD DE MÉXICO.- Esmeralda Verdugo reveló que ella y Lucero Cuevas salieron del América femenil por cuestiones de seguridad tras sufrir un secuestro exprés el pasado 21 de diciembre.
La futbolista, pareja sentimental de Cuevas y con quien ahora jugará en Tijuana, dio su versión para así descartar actos de indisciplina durante su etapa con las Águilas.
“Sí estuve secuestrada junto con Lucero. Llegando a nuestra casa no quisimos poner demanda por miedo a las amenazas, contra nuestras familias, que nos hicieron”, escribió la jugadora en redes sociales.
Dijo que fueron interrogadas por separado e investigadas, incluso con la prueba del polígrafo, para descartar que dicha versión fuera una manera de extorsionar al Club América.
“Después de esto nos dijeron que todo salió bien en las pruebas, que siempre dijimos la verdad y que se trató de un secuestro exprés y que igual no era directo contra el club, nosotras cometimos el error de pararnos en la carretera en una zona de descanso y ahí nos levantaron”, publicó.
“No saben lo feo que es vivir esto, aparte de lo que vivimos ya estando secuestradas, todavía sentir que hiciste algo malo, al momento de que te quieren hacer esas pruebas para ver si dices la verdad. Claro que esto era una manera de demostrar lo sucedido y no tengo ninguna molestia con el club por querer descartar esto, es su trabajo, asegurarse que no hay peligro hacia el club”, agregó Verdugo.
Dicho lo anterior, descartó indisciplina en su partida del América.
“Nunca fue un berrinche ni mucho menos. El club nos ayudó con eso, a darnos préstamos para sentirnos más seguras y pues ir saliendo del trauma que vivimos. Nunca tuvimos un problema con el profesor Leo (Cuéllar), al contrario, él nos apoyó con todo esto y siempre estaré agradecida con el Club América por too su apoyo”, dijo.
El martes temprano, el columnista El Francotirador del diario Récord había dicho que las dos jugadoras involucradas no fueron secuestradas, sino que tuvieron una fuerte discusión y “desaparecieron” por unas cuantas horas.
El evento ocurrió una semana antes de la final de la Liga MX. Durante la comida de fin de año en Coapa, Lucero Cuevas se enteró que el club traspasaría a Esmeralda Verdugo a las Xolas de Tijuana para la siguiente temporada y presuntamente mostró su enojo contra las Águilas.
Tras el enfado, ambas abandonaron la cena y no se supo de ellas por varias horas. Al ver que no respondían las llamadas de familiares y amigos, el América recurrió a la Policía para localizarlas, pero horas después reaparecieron y avisaron que estaban bien.
Tras enterarse que Verdugo sería transferida a Tijuana, Lucero Cuevas, goleadora histórica del América femenil, pidió salir del equipo e ir a las Xolas para permanecer cerca de su pareja, deseo que fue cumplido por la directiva, quien hace unos días hizo oficial su traspaso al equipo fronterizo.
Con información de Agencia Reforma