‘El señor de los túneles’ llega a la corte
Sospechoso de construir pasadizos para ‘El Chapo’ Guzmán se presenta ante un juez de San Diego
“El señor de los túneles”, como se le ha denominado a José Sánchez Villalobos —sospechoso de construir pasadizos para El Chapo guzmán a través de la frontera entre México y EEUU— enfrenta en San Diego 13 cargos federales relacionados con narcotráfico.
Cuatro de esos cargos por túneles transfronterizos entre Tijuana, México, y el sur de California.
Sánchez Villalobos, a quien las autoridades estadounidenses identifican por ocho alias o sobrenombres, fue extraditado a San Diego el último 10 de enero y tres días después fue presentado con hermetismo ante una corte federal en la que —a través de sus abogados— se declaró inocente de los cargos.
Cabe resaltar que la entrega y presentación del acusado pasaron sin ningún tipo de difusión para los medios.
De acuerdo con documentos de la corte a los que La Opinión tuvo acceso, se supo que por lo menos cuatro de los cargos que enfrenta el detenido tienen que ver con financiar, construir y utilizar túneles transfronterizos.
De ser hallado culpable, podría enfrentar una sentencia hasta de 130 años de prisión. Esto, sin sumar dos cargos por uso de túneles en la frontera —que tienen, cada uno, una sentencia potencial de cadena perpetua.
Perfil bajo
Su extradición a EEUU se llevó a cabo en una entrega de bajo perfil. El sospechoso llegó en un vuelo de la central ciudad mexicana de Toluca a San Diego, donde la justicia lo requería por la construcción de túneles y crímenes de narcotráfico desde 2012.
Su abogado en San Diego confirmó en muy breves declaraciones que el acusado solo se declaró inocente y dijo que más adelante la Fiscalía federal informará a un juez el tiempo que le tomaría recabar todas las evidencias contra “el señor de los túneles”.
De acuerdo con archivos de la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en San Diego, Sánchez Villalobos podría haber construido varios de casi un centenar de túneles transfronterizos que se habían descubierto hasta que fue arrestado en México en enero de 2012. No obstante, hoy enfrenta cargos por evidencias recabadas en solo dos túneles.
Los dos túneles
ICE indicó que “el señor de los túneles”, “construyó, financió y operó un túnel transfronterizo, de 612 yardas de longitud, para tráfico de drogas descubierto el Día de Acción de Gracias 2010”.
Se agregó que el conducto estaba “equipado con vías férreas, que conectaba un almacén en el parque industrial Otay Mesa de San Diego con uno en la vecina Tijuana”.
Y que el acceso a la entrada era “a través de una puerta de acero controlada hidráulicamente y un ascensor oculto debajo del piso del almacén”.
La misma agencia informa que un año después, en noviembre de 2011, las autoridades localizaron un segundo túnel atribuido a Sánchez Villalobos, de 600 yardas de extensión, también entre edificios en la zona industrial de ambos lados de la frontera.
En los dos túneles se encontraron toneladas de marihuana —que en 2012 era una de las drogas con mayor tráfico a través de la frontera. Aunque el encauzamiento en la corte, menciona que había 2,200 libras en cada túnel, una cantidad que establece sanciones mayores.
Los cuatro cargos que Sánchez enfrenta con relación a los pasadizos transfronterizos son “por colaborar e instigar” a financiar túneles, a construirlos, y a usar dos de ellos.
Tres de las acusaciones están relacionadas a conspiración y otras seis a la importación y distribución de substancias ilegales.
De acuerdo con documentos, a Sánchez Villalobos se le identifica con los sobrenombres de Quirino, Quinino, Quiri, Garañón, El Gato, Primo, Old Man y Greñudo.
Por ahora, el sospechoso permanece detenido en la cárcel federal del centro de San Diego, el Centro Metropolitano de Correcciones (MCC), de donde paradójicamente pasa custodiado por un túnel para presentarse ante la corte.
La primera detención de Sánchez Villalobos se dio en agosto de 2014 en México.
Cuando lo detuvieron, se le mencionó como posible constructor de los túneles por los que escapaba “El Chapo” Guzmán, pero no se pudo probar que esto era cierto.