¿Por qué debes evitar carne de pollo con rayas blancas?
Las rayas blancas muestran las consecuencias de prácticas para que los pollos crezcan más y en poco tiempo
El pollo que lleva a casa podría tener una condición llamada “rayas blancas”. Para producir pollos en gran cantidad y en poco tiempo, algunos granjeros han optado por realizar modificaciones genéticas en sus aves para que crezcan más rápido y sean más grandes. La práctica conduce a la disfunción muscular, que se manifiesta en estrías blancas a lo largo de la pechuga de pollo.
El defecto de rayas blancas se considera un problema en la carne de pechuga de pollo que está relacionado con el aumento de la tasa de crecimiento de las aves híbridas modernas.
Las rayas blancas significan más grasa y menos proteína, de acuerdo a un estudio publicado en el Italian Journal of Animal Science.
En un estudio de 2016 de la Universidad de Arkansas y Texas A&M, identifico rayas blancas en el 96% de las 285 aves que analizaron.
El efecto de rayas blancas afecta el valor nutricional de la pechuga de pollo, no solo cuando se presenta en casos severos, sino en pechugas de rayas blancas moderadas.
Esta condición también ocasiona en la carne menor retención de agua, reduce absorción de adobos de filetes musculares enteros y menor cocción.
Para poner en perpectiva cómo han cambiado los tiempos de producción de pollo basta ver que en 1950 los pollos en el mercado tenían una edad de 70 días y un peso de 3.08 libras. Mientras que en 2019 su edad es de 47 días y pesan el 6.32 libras, según cifras del National Chicken Council.
No toda la carne tiene rayas blancas en la misma proporción. El pollo es una fuente saludable de proteína y otros nutrientes. Elija la carne más limpia y con un color homogéneo.