Deontay Wilder tuvo que ser llevado al hospital tras la paliza
El equipo del boxeador estadounidense destacó que el atleta se encuentra bien
Luego de que Deontay Wilder fue derrotado por nocaut técnico en el séptimo asalto por Tyson Fury, el pugilista estadounidense tuvo que ser llevado al hospital, ya que sufrió una cortada en el oído izquierdo que necesitó sutura, además de ser evaluado para descartar cualquier problema de salud.
Los primeros reportes indican que el ex campeón mundial completo del CMB se encuentra en buenas condiciones, y su equipo comunicó que se descartaba algún problema en el tímpano.
Asimismo, al bajar del ring, Wilder destacó que le hubiera gustado continuar con la pelea y que su esquina no hubiera lanzado la toalla, pues quería seguir en pie y tratar de atacar hasta el final.
“Mi esquina arrojó la toalla, pero yo estaba listo para salir con mi guardia. Desearía que mi equipo me hubiera dejado salir a pelear. Soy un guerrero“, mencionó el boxeador que cayó por primera vez en su carrera profesional.