10 maneras naturales de combatir la retención de líquidos
La retención de líquidos es una molesta condición que se presenta con una significativa inflamación. Conoce los mejores consejos naturales para eliminar el exceso de sodio y todo lo que no necesita tu organismo
La retención de líquidos o edema es una condición que se caracteriza por la acumulación anormal de líquidos en el cuerpo, lo que sucede es que estos líquidos se acumulan debajo de la piel y dentro de los tejidos que están fuera del sistema circulatorio encargado de transportar la sangre a todo el cuerpo. La realidad es que acostumbrarnos a esta realidad resulta bastante contraproducente, ya que se presenta con molestos síntomas como es el caso de la hinchazón en pies, tobillos, piernas y manos, en muchas ocasiones también sucede en la cara y es una de las principales causas de sentir el estómago como un globo.
Existen muchas causas por las que puede suceder este molesto padecimiento, entre las principales se puede a un desequilibrio de minerales, en el caso de las mujeres puede relacionarse con el síndrome premenstrual o un efecto secundario a la anticoncepción, problemas en el funcionamiento del hígado, los riñones y corazón, algunas enfermedades y diversos tratamientos médicos. La realidad es que siempre que se presente de manera continúa es importante revisarlo con el médico, también muchas veces se puede dar en ocasiones particulares que pueden ser estar en un clima demasiado caluroso, comer mucha sal y viajar.
En general la retención de líquidos ocasional no es nada de que preocuparse y lo mejor de todo es que combatirla con éxito es muy sencillo, realizando un cambio en el estilo de vida, hábitos y por supuesto a niveles nutricionales. Conoce 10 de los mejores consejos creados por especialistas para olvidarte de la retención de líquidos.
1. Reduce el consumo de sal
Probablemente esta es una de las más famosas recomendaciones, la razón es simple cuando consumes mucho sodio la respuesta del organismo es a través de la retención de líquidos. Es por ello que un tip infalible es evitar la sal por un par de días esto facilitará la desinflamación, también es importante que evites el consumo de alimentos procesados, comidas en rápidas y enlatadas.
2. Reduce los niveles de estrés
Probablemente no encuentres relación alguna con esto sin embargo el estrés es un factor que puede provocar edema, esto se debe a un proceso que sucede en las glándulas suprrarenales cuando estás estresado y es que liberan mayor cantidad de una hormona llamada aldosterona que causa la acumulación de líquidos y toxinas.
3. Es simple, bebe más agua
Un remedio infalible y que tal vez resulte contradictorio, es beber abundante agua natural (de 1.5 a 2 lts por día); estos líquidos tienen la peculiaridad de drenar el exceso de sodio en el organismo y son buenos para limpiar a profundidad y desintoxicar. También puedes beber té verde, de hierbas, jugos verdes, smoothies o kombucha.
4. Evita el consumo de alimentos que normalmente te caen mal
Existen muchas alergias alimentarias que tienden a derivarse en síntomas que se presentan de manera inmediata o a lo largo del día, sin embargo cuando se presenta una sensibilidad a ciertos alimentos puede darse con un efecto retardado y la reacción inflamatoria se presenta horas o días después, este proceso es una de las principales causas de la retención de líquidos sobretodo en el abdomen. A modo general la recomendación es evitar el consumo de alimentos con gluten y los lácteos.
5. Reduce el consumo de café y alcohol
Así como existen bebidas naturales que son un gran aliado para eliminar los líquidos retenidos, hay otras que su consumo sólo puede empeorar la situación como es el caso del café y el alcohol. En general causan deshidratación y en cuestión de segundos pueden desequilibrar al organismo y promover rápidamente la hinchazón característica, es mejor evitarlos o limitarte al consumo de 1 taza de café por día y 1 copa de alcohol el fin de semana.
6. Come alimentos con mucho potasio
Los alimentos ricos en potasio son uno de los mejores aliados para contrarrestar los altos niveles de sodio, este mineral actúa equilibrando la sal que se aloja en el organismo y que es la principal fuente de inflamación y molestias. Lo puedes adquirir a través del consumo de plátanos, albaricoques, espinacas, melón y frijoles.
7. Sigue una dieta balanceada
Es importante seguir una nutrición completa y equilibrada que se destaque por la ingesta de todos los grupos de alimentos, procura mezclar de manera armoniosa y en cada comida: las proteínas, las grasas saludables, las verduras de hoja verde y los carbohidratos de absorción lenta. Evita las preparaciones con condimentos comerciales y sustituye el uso de sal por especias y hierbas aromáticas. Dale prioridad al consumo de alimentos con propiedades diuréticas como es el caso de la piña, el apio, las naranjas, las toronjas, el kiwi y las alcachofas.
8. Activa los ganglios linfáticos
Existe un grandioso tip que consiste en cepillar la piel en seco, esto puede ser realmente útil para acelerar el flujo linfático y esto beneficia significativamente la circulación en el cuerpo, de tal manera que se va promoviendo la eliminación de sustancias a través de la orina.
9. Sustituye las leches lácteas por vegetales
En los últimos años se ha puesto muy de moda el consumo de leches vegetales como la de avena, arroz, coco y almendra, son una buena alternativa para las personas que sufren intolerancia. A las leches de proteína animal se les conoce por su capacidad de aumentar la inflamación sobretodo intestinal y se vuelven rápidamente en un enemigo de la retención de líquidos. Optar por el consumo de leches vegetales, es una buena solución temporal, inténtalo y vigila tus síntomas.
10. Evita el consumo de remedios de venta libre
En todas las farmacias existen numerosos remedios de venta libre para combatir el edema lo que sucede es que pueden empeorar, la situación esto se debe a que estas píldoras tienden a eliminar la retención de líquidos a nivel superficial. Normalmente son elaboradas con diuréticos que al principio funcionan bien pero no del todo y eventualmente provocan que el cuerpo conserve más agua y esto causa mayores síntomas.