Muere Tom Lasorda, incomparable ícono de los Dodgers y embajador del béisbol
El carismático expiloto estuvo siete décadas dentro de la franquicia y deja un vacío imposible de llenar
Resumir quién fue Tom Lasorda es sencillo: uno de los hombres más emblemáticos y queridos de la ilustre franquicia de los Dodgers al formar parte de la organización por 71 años.
Para ilustrar su impacto en el equipo de Los Ángeles basta con un momento: el 15 de octubre de 1988, cuando en el primer juego de la Serie Mundial contra los todopoderosos Oakland Athletics, “Tommy” consumó una de sus genialidades y contra toda lógica envió a batear como emergente a Kirk Gibson en la novena entrada a pesar de estar tan lastimado de las piernas que apenas podía caminar. El resto fue magia, e historia.
Esa decisión se convirtió en posiblemente el momento más memorable de las Ligas Mayores en los pasados 70 años y consumó el inmenso legado de Lasorda, cuya muerte la noche del jueves en Los Ángeles ha puesto al béisbol de luto. Tenía 93 años.
El equipo informó que “Tommy”, quien apenas a principios de semana había abandonado un hospital tras varias semanas internado con problemas cardíacos, sufrió un arresto cardiovascular en su casa a las 10:09 pm. Fue llevado rápidamente a una clínica con resucitación en progreso, pero fue pronunciado muerto a las 10:57 pm.
Casi 12 meses después de que el sur de California y todo el deporte se sacudieron por la trágica muerte de Kobe Bryant, Los Ángeles sufre la pérdida de otro de sus íconos, aunque este último distinguido por su increíble longevidad.
“En una franquicia que ha celebrado a tantas leyendas del deporte, ninguna que haya vestido el uniforme representó el espíritu Dodger tanto como Tommy Lasorda“, dijo en un comunicado Stan Kasten, el presidente y CEO de los Dodgers. “Fue un incansable vocero del béisbol, su dedicación al deporte y al equipo que amó fue inigualable… Tommy es simplemente irremplazable e inolvidable”.
Tommy Lasorda, this wonderful man, Hall of Famer in baseball and in life, this is him, so much joy. So much love he had for baseball, for the @Dodgers . To win, to love this game, to live and play with joy was his message to us. Rest in peace in Blue Heaven, sir and thank you. 🙏🏾 pic.twitter.com/45iXnAurYU
— Kenley Jansen (@kenleyjansen74) January 8, 2021
Lasorda, una vida con los Dodgers y dos títulos de genio
Nacido en Norristown, Pennsylvania, Lasorda nunca pudo establecerse en las Ligas Mayores como pelotero. El pitcher zurdo solo tuvo unas cuantas apariciones y cero triunfos con los Dodgers de Brooklyn y Kansas City en los años 50.
Pero luego trabajó en el equipo como scout, manager de ligas menores y coach de tercera base. Eventualmente Lasorda sería nombrado manager de los Dodgers, a los que dirigió entre 1976 y 1996 con un récord de 1,599-1,439, con cuatro campeonatos de la Liga Nacional y por supuesto los dos títulos de la Serie Mundial que alimentaron a la afición de los Dodgers por décadas y en los que el genio de Lasorda fue instrumental.
En 1981, el manager sorpresivamente decidió abrir la temporada con un novato mexicano llamado Fernando Valenzuela debido a una serie de lesiones en su rotación de lanzadores. Valenzuela asaltó al béisbol y así nació la “Fernandomanía”, que culminó ese año con el triunfo sobre los Yankees. Fernando los condujo, pero Lasorda lo hizo posible.
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Y claro, el triunfo de “David vs. Goliat” de 1988, cuando un equipo que no era tan fuerte fue creciendo al ser motivado de manera nada convencional por su manejador, quien retaba a los peloteros y les hacía dar más. Eso ocurrió por ejemplo con el pitcher Orel Hershiser, a quien Lasorda incluso le puso apodo para hacerle sentirse más fuerte y asumir una actitud distinta en el campo. “Bulldog” Hershiser condujo al equipo a la corona.
Lasorda, quien en octubre perdió a su inseparable coach de pitcheo Ron Perranoski, fue entronizado en el Salón de la Fama de Cooperstown en 1997 por sus logros y por un carisma que hizo a las Grandes Ligas más divertidas (fue expulsado 48 veces).
Tommy Lasorda's boundless enthusiasm brought the former minor league pitcher into the @dodgers dugout and all the way to Cooperstown. https://t.co/Cf79GWmpeI pic.twitter.com/3RcxnpeFI3
— National Baseball Hall of Fame and Museum ⚾ (@baseballhall) January 8, 2021
Dodger Stadium siempre le dedicó su amor a Tommy
Ya retirado como manager, Lasorda nunca dejó de aparecer en Dodger Stadium, su casa, y prácticamente en cada ocasión siempre hubo un momento entre innings en que los aficionados se pusieron de pie para dedicarle una ovación. Solía sentarse a un lado de Magic Johnson.
Hall of Fame Dodgers Manager, LA icon, and my great friend Tommy Lasorda passed away late last night. For the last 8 years I’ve sat next to Tommy at every Dodgers game and he taught me invaluable lessons on the strategy and history of baseball. pic.twitter.com/6RxmoQ7Che
— Earvin Magic Johnson (@MagicJohnson) January 8, 2021
“Tommy” se desempeñó los últimos 14 años como asesor especial del dueño de los Dodgers, y su pasión por el juego nunca se debilitó. Felizmente, “Mr. Dodger” pudo ver al equipo regresar a la cima de las Ligas Mayores este pasado otoño y estuvo presente en el estadio de los Rangers de Texas, donde los Dodgers ganaron la Serie Mundial contra Tampa Bay.
La muerte de Tom Lasorda ocurrió apenas cuatro días después de la muerte de Sandra Scully, esposa del mítico cronista Vin Scully, el otro enorme ícono de los Dodgers.
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