Mia Malkova, actriz del cine para adultos, transforma su nueva mansión en castillo porno

La actriz californiana Mia Malkova, de 28 años, adquirió en días recientes una lujosa mansión en Portland, Oregón, por la que desembolsó $3,900,000 de dólares.

La propiedad, marcada con el número 14125 del NW Germantown Road y que se asemeja a un castillo, no solo será utilizada por la estrella del cine para adultos para dormir, sino que también para rodar algunas escenas eróticas, tal y como ella misma lo dio a conocer.

“El hecho de que sea un castillo, esa es mi parte favorita, que tiene la temática de un castillo y tiene una temática de fantasía. Es muy excéntrico. Definitivamente filmaremos aquí contenido para adultos”, declaró la sensual rubia en entrevista con New York Post.

La residencia, de 13,000 pies cuadrados de construcción y ubicada en un terreno de 6.4 acres, cuenta con cinco recámaras y cinco baños, así como diversos elementos relacionados a todo castillo, como es el caso de armaduras, escudos y torretas.

También tiene un vestíbulo, cocina, comedor, sala de estar, sala principal, sala de televisión, sala de cine, bar, cava de vinos, biblioteca de dos pisos, gimnasio con pared de rápel, entre otras habitaciones.

La recámara principal, que es donde Mia seguramente cumplirá gran parte de sus fantasías, tiene un sauna y una bañera de hidromasaje, así como espacio para una cama grande y una chimenea en una pared de piedra.

En el exterior hay fuentes, extensos jardines, cancha de tenis, así como un viñedo y un espacio dedicado para la preparación de vinos con su respectiva cava.

El castillo está rodeado de altos y frondosos árboles, por lo que se cuenta con una privacidad envidiable.

Por si estos lujos fueran poco, Mia Malkova y su pareja, el productor Eli Tucker, planean desembolsar $1,000,000 de dólares en diversas adecuaciones, lo que incluye la instalación de un barco pirata y una piscina en una gruta, así como la remodelación de su habitación, pues desean darle un giro drástico al que será su nidito de amor.

La compra del imponente castillo, conocido como Blackberry Castle y que fue edificado a lo largo de siete años, se produjo tras varios intentos fallidos de los antiguos propietarios por venderlo.

La residencia de estilo medieval terminó en manos de Mia y Eli tras años en el mercado y tras sufrir ocho recortes en su precio original, por lo que se hicieron de una gran oferta a la que, seguramente, le sabrán sacar el máximo provecho.

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