Fanáticos vuelven con toda la emoción al Dodger Stadium
Unos 15,000 espectadores celebraron la victoria del equipo en Los Ángeles
La Avenida VinScully volvió a pintarse de azul este viernes cuando el Dodger Stadium reabrió, desde su cierre en octubre de 2019, para que los aficionados pudieran ver a los ganadores de la Serie Mundial del 2020 recibir sus anillos de campeones.
La pandemia por el COVID-19 obligó al estadio a cerrar sus puertas para los fanáticos todo el año pasado y ayer pudieron recibir a unos 15,000 angelinos, el 20% de la capacidad del complejo, quiene habían esperado más de 560 días para volver a ver a los chicos de azul en el diamante.
Las medidas de seguridad fueron estrictas para la tranquilidad de los asistentes, que debían llevar el boleto de estacionamiento de forma digital, no se permitió el uso de efectivo y la comida debía ordenarse a través del celular para evitar el contacto; además del uso obligatorio de la mascarilla y la distancia de seis pies entre cada individuo.
Eddie Quillares, un gran aficionado del equipo dirigido por Dave Roberts, explicó que aunque hubo un poco de caos en el estacionamiento y al momento de comprar comida, todo valió la pena por ver a su equipo jugar en casa por primera vez en más de un año y sobre todo verlos conseguir la victoria por 1-0 frente a los Nacionales de Washington.
“Voy a ser honesto, entiendo que fue el primer día, pero en el estacionamiento no estaban preparados, hacían preguntas y fue muy lento… Nadie podía llevar dinero [en efectivo] pero se tardaron mucho y con la comida, la gente tuvo que esperar casi dos horas por su pizza, y luego el sistema de comida se cayó y nadie pudo ordenar comida”, explicó el México-Americano que manejó desde el condado de Orange para asistir al Opening Day.
Todos esos problemas de logística quedaron atrás en el momento en que empezó la ceremonia para entregar los anillos a los campeones.
“Me sentí muy orgulloso de poder estar en el estadio hoy [ayer], sobre todo porque pudimos celebrar el campeonato con ellos, porque cada jugador recibió su anillo, y ver a toda la comunidad de los Dodgers fue estupendo, la energía fue muy positiva… Tener la oportunidad de ir al estadio fue un privilegio”, dijo el hombre de 38 años que asistió al juego con un grupo de buenos amigos.
“Todo lo que pasó con la comida y todo eso no me importó, lo más importante fue ver a los jugadores agarrar su anillo, a [Clayton] Kershaw… Casi lloraba de verlo recibir ese anillo, ver a Justin Turner y a todos los veteranos, todo eso me dio mucho gusto. Ver a [Julio] Urías fue muy emocionante porque toda la gente se paró a la aplaudirle”, contó Quillares.
El lanzador mexicano fue el clave durante la pasada Serie Mundial, que los Dodgers conquistaron tras 32 años de sequía.
“Fue un momento mágico, después de todo lo que hemos pasado en el 2020 con el coronavirus, estar aquí viendo a mi equipo es maravilloso, casi no lo creo”, comentó Claudia López, una joven de origen guatemalteco que fue al estadio junto a sus primos.
La chapina explicó que es un momento de mucha felicidad para su familia ya que es la primera vez que se reúnen desde que inició la pandemia y lo hacen con la tranquilidad de estar todos vacunados.
“Son muchas emociones, estar aquí es la mejor forma de celebrar la vida y la salud”, agregó.
Aficionados responsables
Quillares confesó sentirse orgulloso de los aficionados de Dodgers porque todos respetaron las reglas.
“Toda la gente usó mascarilla y mantuvo la distancia, la gente entendió que era un privilegio estar allí viendo al equipo, la verdad es que es como surreal, porque no quieres que te quiten esto de nuevo, entonces queremos ser parte de la solución y no del problema. Por eso todos seguimos tomando precauciones”, comentó.
El hombre de 38 años también afirmó que lo mejor de la tarde fue celebrar un triunfo más de los campeones.
“El equipo estuvo siempre pendiente y la intención para cuidarnos fue muy positiva y eso me dio mucho gusto, tienen que arreglar algunas cositas, pero lo más importante es que ganaron los Dodgers”.
Boletos a la suerte
No todos tuvieron la oportunidad de conseguir entradas para el juego de apertura en DodgerStadium, ya que la mayoría las obtuvo a través de un sorteo que el equipo organizó debido a la gran demanda que hubo.
“Tengo boletos para la temporada, como cliente me dieron la oportunidad de escoger primero”, explicó Quillares.
No obstante, al aficionado del equipo Eric Torres, le tocó disfrutar ayer el juego en un popular local en Westminster. “No puede agarrar boletos, no tuvimos suerte y los que vimos en reventa estaban muy caros”, dijo. “No es igual que estar en el estadio, pero es lo que nos tocó”.