Biden condena el odio contra la comunidad LGTBQ+ en aniversario del tiroteo de Pulse
Biden dijo que la discoteca Pulse es ahora un "territorio sagrado" y será un monumento nacional, en el quinto aniversario de la masacre que cobró las vidas de 49 personas
WASHINGTON – El presidente Joe Biden condenó este sábado el odio contra la población LGTBQ+ y pidió hacer frente a la “epidemia de violencia” contra las mujeres transgénero, con motivo del quinto aniversario del tiroteo en la discoteca gay Pulse en Orlando (Florida).
En un comunicado, Biden también pidió aumentar el control de armas en su país y confirmó que firmará una ley para convertir en “monumento nacional” el bar donde se registró el peor ataque contra la comunidad LGTBQ+ de la historia de EE.UU., un tiroteo que dejó 49 muertos.
“Tenemos que reconocer el impacto particular de la violencia armada en las comunidades LGTBQ+ en todo nuestro país”, destacó Biden.
“Debemos acabar con el odio y las desigualdades que contribuyen a la epidemia de violencia y odio contra las mujeres transgénero, especialmente las mujeres transgénero que no son blancas”, añadió.
Al menos 44 personas transgénero o de género no binario fueron asesinadas a tiros o por otros medios en Estados Unidos en 2020, el año más letal para ese colectivo en la última década; y otras 28 han fallecido de la misma forma en lo que va de 2021, según la organización Human Rights Campaign (HRC).
On June 12, 2016, 49 innocent people were killed at Pulse nightclub. Today, we honor the victims and reaffirm our commitment to ending senseless acts of gun violence. #Pulse5YearsLater #HonorThemWithAction https://t.co/HBrccYBwun
— Human Rights Campaign (@HRC) June 12, 2021
“Debemos crear un mundo en el que nuestros jóvenes LGTBQ+ sean queridos, aceptados y se sientan seguros viviendo de acuerdo con su verdad”, recalcó Biden.
Por eso, pidió al Senado que apruebe “rápidamente” la Ley de Igualdad, ya refrendada por la Cámara de Representantes en febrero pasado y que prohibiría “la discriminación por motivos de sexo, orientación sexual e identidad de género” en espacios públicos y en los programas sociales financiados con fondos federales.
Además, insistió en que el Congreso debe “prohibir las armas de asalto y los cargadores de munición de gran capacidad”, resucitando un veto nacional de ese tipo de rifles que se aprobó en Estados Unidos en 1994, pero que caducó en 2004 sin que el Congreso lo renovara.
Y subrayó que el Senado debe aprobar tres proyectos de ley que ya han recibido el visto bueno de la Cámara Baja y que cerrarían los vacíos legales en el sistema de verificación de antecedentes de los compradores de armas, entre otras medidas.
Es improbable que alguna de esas medidas reúna los 60 votos necesarios para salir adelante en el Senado, donde la estrechísima minoría demócrata debería convencer a diez republicanos de sumarse a ellos.
En cuanto al tiroteo en Pulse, del que este sábado se cumplen cinco años, Biden recordó que unos días después visitó la zona como vicepresidente, impactado por ese acto de odio contra personas “jóvenes, negras, de origen asiático y latinos”, muchos de ellos de origen puertorriqueño.
El mandatario confirmó que en los próximos días firmará una ley refrendada por ambas cámaras del Congreso para convertir a Pulse en un “monumento nacional”, que “dejará claro” que esa discoteca es ahora un “territorio sagrado”.