Vendedor ambulante encuentra su carrito de helados quemado
Familia pide ayuda para encontrar a la persona responsable y para poder reparar el medio con el que se sustentan
Hugo Dávila ha vendido helados por más de 20 años en Los Ángeles y lo que menos imaginaba es que alguien quisiera hacerle daño a él o a su negocio, el cual —considera— lleva mucha felicidad a los niños de los vecindarios cercanos.
El vendedor ambulante, de 60 años de edad, contó que el viernes 11 de junio dejó su camión de helados estacionado en el vecindario de Cypress Park, específicamente en un local que renta desde hace años y donde se dejan los camiones de ventas (conocido en inglés como commissary).
El sábado no trabajó pero cuando regresó el domingo, a recoger su camión para su venta diaria, lo encontró quemado en gran parte del interior.
Sin saber exactamente cómo reaccionar, el sexagenario dijo que quiso hacer un reporte a la policía pero que le dijeron que otra señora, que también deja su camión en el lugar, ya había llamado para hacer el reporte.
“Yo me fui confiado pensando que ya lo habían hecho porque los domingos la oficina no abre y no había nadie que me pudiera ayudar”, indicó el vendedor.
Hugo confesó haberse sentido muy frustrado y triste, ya que este camioncito de helados lo había comprado hace un año después de vender un camión más grande que tenía.
“Con la pandemia bajaron mucho las ventas y no podía con el camión grande”, contó el mexicano.
El vendedor también señaló que en dicho estacionamiento hay cerca de 30 camiones pero que solo su camión fue afectado. “Como que le echaron gasolina y después le prendieron [fuego] ahí donde tengo los dulces”, contó.
Estima que la pérdida sobrepasa los $5,000 ya que no solo tiene que recuperar la mercadería perdida sino también debe reparar el vehículo, que es su elemento de trabajo. “Tengo que comprar y arreglar lo eléctrico que se echó a perder con la quemada”, expresó.
¿Crimen de odio?
Aunque Dávila no lo puede comprobar, cree que pudo tratarse de un crimen de odio. “Hay mucha gente agresiva, yo no soy de problemas y no me meto con nadie. No se por qué hicieron esto”, indicó.
El Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD) informó hace poco sobre un aumento alarmante de casos de asalto y robo contra vendedores ambulantes. Se estima que entre 2010 a 2018, los delitos subieron de 38 a 166 por año, un aumento de 336% en menos de una década.
Esto sin contar los recientes ataques ocurridos desde que comenzó la pandemia por el Covid-19 donde se ha notificado de varios vendedores ambulantes atacados a plena luz del día.
Hugo está preocupado ya que es el sustento de su hogar. Por ahora, su esposa no puede trabajar debido a una embolia sufrida en 2020 y apenas comienza a recuperarse. “Yo no estaba trabajando mucho, solo en la tarde de 2:00 p.m. a 6:00 p.m. porque tengo que darle de comer y ayudarla”, dijo Hugo.
Buscan respuestas
Jenesis Dávila, hija de Hugo, creó una cuenta de GoFundMe para ayudar en los gastos de recuperación del negocio.
Hugo dice que aunque ya hay un reporte de policía, no pudo conseguir el video captado por las cámaras de seguridad del estacionamiento ya que aparentemente fue borrado por error. No obstante, Jenesis logró grabar con su celular algunas de las imágenes donde se ve a una persona sospechosa con una bufanda en la cabeza. El incidente ocurrió el sábado 12 de junio alrededor de las 6:11 a.m.
La Opinión intentó contactar a los encargados del local La Palma Ice Cream & Candy, lugar que renta espacios para los camiones de vendedores, pero al cierre de esta edición no hubo respuesta.
Si tienes detalles de este incidente, llama a la estación Northeast de LAPD al 1(323) 561-3211 y pide hablar con el oficial Torres o el oficial Díaz.
Para ayudar a Hugo Dávila a recaudar fondos para reparar su camión de helados puedes visitar la web de GoFundMe AQUI