Carlos Vives filarmónico en el Hollywood Bowl

El pasado fin de semana no fue común y corriente para los aficionados a la música latina en Los Angeles debido en buena parte a las dos presentaciones -viernes y sábado- del colombiano Carlos Vives con su repertorio de vallenato pop junto a la orquesta filarmónica dirigida por el maestro Gustavo Dudamel.

Pese al covid, un lleno total le dio la bienvenida con fervor al intérprete de Fruta Fresca, La Bicicleta y Pa’ Maité entre otras favoritas, pero esta vez apoyado en el sonido poderoso y envolvente de una de las compañias sinfónicas más famosas del mundo y de su carismático director.

No solo la alegre y pegajosa mezcla que Vives ha sabido hacer parte de la cultura musical latinoamericana ganó en riqueza y profundidad de sonido con esta majestuosa orquesta, sino que el carisma de sus protagonistas se llevó las palmas del icónico escenario angelino.

Sin embargo no todo fue rumba en las colinas de Hollywood. El programa inició con los cuatro movimientos de la Suite No. 1 Peer Gynt de Grieg y el Danzón 8 del compositor mexicano Arturo Márquez, en un admirable esfuerzo de la compañía angelina por incluir melodías clásicas en los programas de música popular.

Al cantante, que cumple ya 60 años, también le acompañó la joven artista colombo-canadiense Jessie Reyes, durante una interpretación a duo de la famosa Gota Fría con arreglos para orquesta filarmónica y al lado del acordeón vallenato que este y su grupo La Provincia (junto a la reconocida gaitera Mayté Montero) han sabido pasear con éxito en los escenarios del mundo entero.

Dos noches memorables que le dieron a los asistentes al ‘Bowl’ una muestra de talento, versatilidad y diversidad. Y le ratificaron a Vives el estatus sinfónico que se ganó hace ya un par de años con un apreciable esfuerzo y una inteligente apuesta por sus raíces.