Los Dodgers celebran los 40 años de la Fernandomanía: los fans se rindieron otra vez ante Fernando Valenzuela
En la noche más mexicana de todas, "El Toro" Valenzuela recibió honores en Dodger Stadium, el lugar donde el exlanzador cambió la historia del béisbol y de Los Ángeles
En la fecha del tradicional Grito de la Independencia de México y marcando el comienzo del Mes de la Herencia Hispana, los Dodgers de Los Ángeles rindieron tributo a su mayor exponente mexicano e hispano de todos los tiempos: Fernando Valenzuela.
Los Dodgers conmemoraron con sus aficionados 40 años de la Fernandomanía la noche del miércoles. Lo hicieron entregando figuras coleccionables ‘bobblehead” de Valenzuela a los primeros 40,000 aficionados que llegaron al estadio y luego con una ceremonia antes del juego contra los Arizona Diamondbacks.
Edward James Olmos, el icónico actor angelino, fue el presentador con sentidas palabras dirigidas a Fernando por su impacto social en Los Ángeles. Valenzuela, acompañado por su esposa Linda, sus hijos, sus nietos y también por Mike Brito, el scout que hizo posible el fichaje del exlanzador zurdo para los Dodgers, caminó al terreno de juego con música de mariachi y las letras de “El Rey”.
El primer lanzamiento del partido fue realizado por la nieta de Fernando, Tatiana, y el propio “Toro” fue el receptor.
Fue una emotiva ceremonia que continuó durante el juego con videos y ovaciones para el venerado No. 34 de los Dodgers que ahora es comentarista de las transmisiones de radio junto a Jaime Jarrín y Pepe Íñiguez.
Dodger Stadium representaba una página oscura para la comunidad mexicana de Los Ángeles hasta antes de la aparición de “El Toro de Etchohuaquila” a principios de los 80’s debido a los desplazamientos de mexicanos que vivían en Chavez Ravine, terrenos sobre los que años más tarde se construyó el estadio.
Cuando Valenzuela abrió la campaña de 1981 por los Dodgers con una blanqueada de 2-0 sobre los Houston Astros y dio inicio a la fiebre conocida como la Fernandomanía, muchos latinos finalmente pudieron olvidar o al menos darle la vuelta a la página. Guiados por él con su temporada mágica de Novato del Año y el Trofeo Cy Young, los Dodgers ganaron la Serie Mundial.
Han sido 40 años desde entonces, pero la leyenda de “El Toro” siempre se mantendrá viva en el sur de California y en México, donde Fernando también es adorado sin importar el paso de las décadas.
Para redondear la noche mexicana ante 46,520 aficionados en Dodger Stadium, Julio Urías fue el pitcher abridor por Los Ángeles. el lanzador zurdo buscaba ser el primero de las Ligas Mayores en llegar a 18 juegos ganados.