Thanksgiving a la mexicana, reemplazan el pavo relleno por una suculenta birria
Familia salvadoreña-mexicana celebra este año con un platillo tradicional, pero de México
Familia Amaya lista para la birria. Crédito: Familia Amaya | Cortesía
Como ya es tradición desde hace más de dos décadas Dora Amaya comienza los preparativos para su cena del Día de Acción de Gracias un día antes. Para ella y su familia esta es una cena muy esperada pese a que el gran ausente en el comedor es el tradicional pavo.
Este ha sido reemplazado por platillos mexicanos no menos deliciosos. En esta ocasión la cena será birria.
“Un día antes me encargo de marinar la carne para que este lista el jueves”, dijo Amaya de 57 años.
La mujer de origen salvadoreño dijo que este cambio de platillo para la cena ocurrió unos años después de que se casó. Ella contó que inicialmente intentó continuar la tradición americana de cocinar el pavo pero su esposo no era fanático de su sabor.
“Se lo hacia con pan, en mole, en tinga y nada funcionaba”, contó Amaya. “Mi esposo detesta el pavo. Siempre terminaba en la basura”.
Así que Amaya decidió cambiar el pavo por tamales, mole, enchiladas y birria, entre otros tradicionales platillos mexicanos. Ahora el esposo de Amaya espera con ansias las delicias del Día de Acción de Gracias al estilo mexicano.
Compartiendo sus alimentos
Amaya dijo que tiene tres hijos, dos de los cuales ya están casados y por lo general pasan el Día de Acción de Gracias en otros hogares.
Pero desde hace varios años los Amaya han hecho una tradición de invitar a miembros de su iglesia solteros para que disfruten la cena junto a ellos y no se sientan solos en está celebración de gratitud.
“Siempre invitamos a los que puedan venir. Antes venían más, ahora llegan unos dos o tres”, dijo la residente de San Gabriel.
En este Día de Acción de Gracias, Amaya quiso agradecer el hecho de estar viva un año más y por haber estado resguardada en todo momento.
“En la familia todos estuvimos seguros durante la pandemia y ninguno nos enfermamos [del covid-19]”, dijo Amaya. “Tampoco nunca nos faltó el trabajo ni el pan para llevarnos a la boca”.
La celebración del Día de Acción de Gracias es una de las más importantes de Estados Unidos en comparación con cualquier otro día del año. En este día se estima que se comen alrededor de 46 millones de pavos. En navidad se consumen 22 millones y en Semana Santa tan solo 19 millones.
De acuerdo a la Federación Nacional del Pavo, el 88% de los americanos que celebran la tradición comen pavo en este día.
La celebración del Día de Acción de Gracias
Esta celebración data en los años de 1600 aproximadamente, cuando los colonos de Plymouth, Massachusetts compartieron una comida con los indios de la tribu Wampanoag para celebrar la cosecha del otoño y agradecerles su ayuda por enseñarles a cazar, pescar y cultivar la tierra.
El pavo llegó a ser el gran invitado de la celebración debido a su tamaño, el cual era suficiente para alimentar a grandes familias y era muy común en Massachusetts. A diferencia de las vacas o las gallinas, el pavo se cria específicamente para ser comido y no para esperar que produzca alimentos adicionales.
La tradición continuó en una forma de agradecer junto a la familia las bendiciones recibidas durante el año. En Estados Unidos el Día de Acción de Gracias se celebra el cuarto jueves de noviembre y en Canadá el segundo lunes de octubre.
Celebrando sin bajar la guardia
El Departamento de Salud Pública (DPH) del condado de Los Ángeles recomienda a las personas que si se reúnen con alguien con mayor riesgo de enfermedad grave o que no esté completamente vacunado, celebren de manera segura al aire libre tanto como sea posible. Se recomienda que utilicen máscaras cuando estén adentro y mantenga la distancia mientras come o bebe. También se recomienda que incluso considere reunirse virtualmente.
Se enfatiza que se eviten los lugares concurridos y se use su mascarilla cuando las personas estén en lugares aglomerados al aire libre. Si viaja para el Día de Acción de Gracias, siga todas las pautas de vacunación, pruebas y cuarentena de salud pública locales y nacionales.
El DPH indica que personas no vacunadas corren un mayor riesgo de contraer y transmitir el covid-19 a otras personas, lo que crea un riesgo adicional para las reuniones festivas donde no todos los asistentes están completamente vacunados.
