México resiste la cuarta ola de COVID y sus variantes

MEXICO.- En la familia de Irving Marín todos fueron vacunados contra el coronavirus. Por eso viajaron de la Ciudad de México a Playa del Carmen, en la Riviera Maya, para festejar por todo lo alto la Navidad, el fin de año y el cumpleaños número 50 de su mamá junto con tíos, primos, novios y gente cercana. 

Las autoridades de salud habían advertido de una cuarta ola de contagios para el invierno, pero ellos estaban confiados. “Incluso a mí ya me había dado covid una vez”, recuerda Irving, 27 años, fundador de Marea Alcalina, una página web que genera catálogos y menús digitales.

Una noche los más jóvenes salieron a divertirse a un antro. Sudaron, bebieron y compartieron espacios con otras personas. En México no hay restricciones oficiales para que los negocios permanezcan cerrados. El semáforo epidemiológico ha estado en verde, lo cual significa que no hay restricciones de movilidad.

“Mi novia dijo que teníamos un alto riesgo de contagio, pero los demás nos confiamos”.

A los tres días, los cuatro muchachos que salieron a la discoteca empezaron a tener síntomas: tos, gripa, cuerpo cortado y dolor de cabeza. Se hicieron la prueba y resultaron positivos. De eso hace 10 días. 

Para el sábado 15 de enero pasado, las autoridades sanitarias compartieron el informe técnico diario acerca de la presencia del virus SARS-CoV-2 en el país, en el cual, Irving y su familia fueron incluidos como parte de los más de 4.3 millones acumulados desde que empezó la pandemia.

Los contagios en esta temporada se han elevado a un promedio diario de 45,000 casos y sigue en aumento. En las últimas 24 horas fueron  47,000 nuevas personas que reportaron el cuadro sintomático y 227 nuevas muertes.

La Secretaría de Salud informó que en total desde 2019 han muerto más de 330,000 personas por COVID cuya edad promedio es de 64 años.

Pero, a diferencia de las olas de contagios anteriores, este invierno no se ha salido de control, no se han desbordado los hospitales y por ello no se han restringido actividades.

En la Ciudad de México con más de 20 millones de habitantes, actualmente el número de hospitalizados por covid son poco más de 1,200 y solo una quinta parte han requerido ventilador, según explicó Eduardo Clark , director de gobierno en la capital mexicana. 

 “El 81% de los pacientes en los Hospitales del Gobierno de la Ciudad de México fue porque no tenían su esquema completo de vacunación contra el COVID-19″

Los embates

De cualquier forma, la Organización Panamericana de Salud (OPS) está en alerta. Cree que en México la cuarta ola por coronavirus será mayor y más intensa.

“De acuerdo con los análisis de la Secretaría de Salud federal, se prevé una cuarta ola superior a la tercera y, comparativamente a la misma época en 2021, se observan muchos más casos”, explicó Sylvain Aldighieri, gerente de Incidente para COVID-19 de la OPS.

El 11 de enero, se llegó a nivel federal a una cifra récord con más de 33, 600 nuevos casos y también un récord de caso activos con más de 70 mil en los últimos días. Sin embargo, menos letales. 

Irving Marín y sus amigos contagiaron a toda la familia que los acompañó a Cancún, gente de entre 19 y 59 años. Regresaron a la CDMX para meterse en sus casas en cuarentena, donde siguen sin mayores complicaciones.

“Creemos que fue la ómicron por los síntomas, nadie perdió el gusto ni el olfato”, precisa optimista ante su recuperación y la de los demás.

Antes de vacunarse con AstraZéneca, Irving se había contagiado en Bogotá, cuando visitó a su familia paterna. Salió un sábado a cenar con su primo, se tomaron unos tragos en un bar y platicaron con muchas personas.

Al otro día sintió como si tuviera una mala resaca.  El lunes vino la fiebre el malestar estomacal, momentos estreñido, a ratos con diarrea. Fiebre y cuerpo cortado. 

“No tenía ganas de hacer nada, el área cognitiva estaba totalmente afectada. Soy ingeniero en sistemas y programo software, necesito mucha concentración y no lo lograba”, precisa. En cambio, “ahora, estoy trabajando en casa normal”. 

Los políticos y sus mensajes

Como Irving, el presidente Andrés Manuel López Obrador se enfermó en estas fechas por segunda vez. Suspendió su presencia física en las conferencias de prensa matutinas pero no dejó de trabajar virtualmente.

Incluso envió mensajes para tranquilizar a la población. En un video publicado en redes sociales, explicó cuál fue el tratamiento que siguió en los últimos días para superar la infección. 

Dijo que se había tratado con paracetamol, vaporub, miel y otros remedios caseros y que vivir la enfermedad en carne propia le permitía saber que no era tan grave.

“No tomo medicamentos especiales”, dijo. “Deben de aplicarse  a quienes tienen enfermedades crónicas”, aclaró.

México aprobó recientemente para uso de emergencia la pildora anticovid de la farmacéutica Pfizer, aunque aún no se sabe cuándo llegará ni para qué casos exactamente será utilizada.

En tanto, diversos estados del país reportan contagios en las oficinas de gobierno. En el congreso federal se tuvieron que suspender las actividades de la Comisión Permanente y en los estados de Querétaro, Sinaloa e Hidalgo suman decenas de contagios entre los diputados.

En algunas escuelas han tenido que volver a la modalidad en línea puesto que los niños menores de 15 años aún no han sido vacunados. 

En días recientes, la diputada federal Kenia López calificó de “inhumano” que los niños no puedan acceder a una vacuna contra el coronavirus, pues aseguró que, en varios países se inoculan a los menores desde los dos años de edad.

En los estados fronterizos los padres que pueden ir a Estados Unidos están llevando a sus hijos porque en México se está primero reforzado a las personas mayores de 50.

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