Revelador: Miembro de la Barra del Querétaro pide perdón por los hechos violentos y confiesa su verdad
Víctor Mario Díaz confesó que fue cómplice pero que quiere enmendar sus actos y está dispuesto a colaborar revelando los nombres de los agresores
Estos son los rostros de los pistoleros que pelearon contra la gente del CJNG durante un partido de futbol en Querétaro, México. Crédito: @arcangel_23pro | Cortesía
Luego de los violentos sucesos que se dieron en el Estadio La Corregidora de Querétaro, entre un grupo de aficionados de los Gallos Blancos en contra de hinchas de Atlas, un miembro de la barra ‘La Resistencia’ de Querétaro reveló detalles que no se sabían hasta el momento de los incidentes.
El barrista, identificado como Víctor Mario Díaz Díaz, se manifestó a través de sus redes sociales, en donde se disculpó públicamente por los lamentables sucesos que ocurrieron pero aclaró que él no participó directamente en las agresiones que recibieron los aficionados de Atlas.
A pesar de eso sí confesó que fue cómplice pero que quiere enmendar sus actos y está dispuesto a colaborar revelando los nombres de los agresores que participaron durante los violentos hechos.
No obstante, el barrista arremetió contra los medios de comunicación por, según afirma él mismo, tratar de polarizar lo que sucedió.
Una de las verdades que Díaz confesó es que el club le da cierto apoyo que van más allá de los boletos gratuitos a los partidos, entre los que destacan vender y distribuir ropa del equipo y en retribución al club, debe intervenir cuando hay problemas en las gradas.
Uno de los mencionados por Díaz fue Pablo Mendoza, quien identificó como uno de los líderes de la barra y uno de los sujetos más violentos.
Las impresionantes revelaciones de Díaz aseguran que toda la gresca ya estaba planificada entre el personal de seguridad y los miembros de la barra del Querétaro, y que solo estaban esperando la confirmación de Pablo para que se abrieran las rejas.
De igual forma, confesó que los mismos guardias fueron los que les proporcionaron las armas, incluso algunos entregaron sus armas de fuego.
Díaz aseguró que luego de ver que todo se salió de control y los barristas de Querétaro comenzaron a golpear a mujeres y niños, decidieron darse a la fuga, ya que eso no estaba en el plan original, que era hacer correr a los del Atlas.
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