Mujeres ucranianas relatan terribles momentos que sufrieron durante la ocupación rusa en sus ciudades
Una de ellas reveló que los soldados rusos usaban a las mujeres y los niños como escudos humanos. Estuvieron escondidas en los sótanos cinco semanas con poca comida y agua
Cuando salieron de sus guaridas descubrieron los horrores que las tropas rusas hicieron en sus ciudades. Crédito: Getty Images
Cuando las fuerzas rusas llegaron para ocupar la ciudad de Bucha el 27 de febrero, Larysa Savenko, su hijo y una persona sin hogar se refugiaron en el cobertizo de su casa, desde ahí escuchaban los estruendos de las armas. A pocos metros de su casa percibieron el olor de la madera quemada de todo lo que iban destruyendo.
“Había disparos por todas partes, así que salimos por la ventana de la cocina y nos escondimos en un sótano”, comentó la mujer al ABC.
Durante cinco semanas estuvieron sin agua, luz, con poca comida y agua. La mujer relato al mismo medio de comunicación que cuando podía salía de su guarida para llegar a la casa de su vecina para alimentarla con algo, ya que la señora no podía caminar.
En los momentos que no se escuchaban los bombardeos salían para verificar cómo estaba su vecindario y se daban cuenta de perturbadores momentos: “Miramos hacia afuera y había manos y piernas amputadas tiradas”, detalló.
Después de varias semanas, la ocupación rusa se retiró de Bucha y fue cuando las atrocidades comenzaron a emerger, fue ahí cuando la señora Savenko y su hijo vieron cadáveres en toda la calle donde se ubicaba su domicilio.
“La casa de mi amigo fue incendiada. Todo está arruinado, es aterrador. No puedes hacer esto en el siglo XXI. Es una pesadilla todas las torturas, es imposible”, expresó la mujer.
Larysa Savenko verá que puede recuperar de su casa, pero confiesa que tiene miedo de que los rusos regresen a su ciudad.
Las personas comienzan a retornar al lugar, donde un día fueron felices, donde estaba su patrimonio, como es el caso de Olga, Oleksandr y su hijo Dmytro, quienes sí alcanzaron a salir de Bucha. Al llegar a la ciudad descubrieron un lugar que jamás imaginaron, se dirigieron a su departamento que resultó dañado en un ataque aéreo.
“Había una familia con niños, les dijimos dónde estaban las llaves y entraron por la ventana. Tomaron agua y algo de comida para sobrevivir y se quedaron en el sótano hasta que pudieron escapar”, compartió la mujer de 42 años, al mismo noticiero.
La familia de Olga que vive en Rusia no podía creer todo el daño que habían ocasionados los soldados durante la ocupación en su población.
En Berestyanka la situación fue igual de aterradora como en Bucha, y Larysa Fedorets fue testigo de los terribles momentos que vio durante el tiempo que los militares estuvieron destruyendo la población.
“La gente nos llamaba para decirnos que nos quitáramos las joyas, que las mujeres jóvenes se pusieran los pañuelos en la cabeza y se vistieran como ancianas”, apuntó la mujer a el ABC.
Fedorest de 56 años, también estuvo escondida todo el tiempo en el sótano de la casa de su vecino y cuando podía arrastrándose de rodillas iba a su casa para buscar artículos, evitando que los soldados la pudieran detectar.
Jamás pensó que los militares cometieran tan escalofriantes atrocidades, ya que uno de sus vecinos le dijeron que usaban a las mujeres y a los niños como escudos para evitar las balas.
“Nos dijeron que los soldados usaban a mujeres y niños como escudos humanos. Caminaban con sus ametralladoras apuntándonos, en la noche aparecían borrachos y disparaban a la gente en las piernas”, recordó la mujer.
Antes de que las tropas rusas liberaran la aldea la semana pasada, se llevaron todo lo que pudieron de las casas y los dejaron sin nada.
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