El primer turista espacial: Dennis Tito
Dennis Anthony Tito es un ingeniero y multimillonario estadounidense, más conocido como el primer turista espacial que financió su propio viaje al espacio. A mediados de 2001, pasó casi ocho días en órbita como miembro de la tripulación de la ISS EP-1, una misión de visita a la Estación Espacial Internacional.
Antes de abordar una nave espacial rusa Soyuz, Tito entrenó durante ocho meses. Crédito: STRINGER | AFP / Getty Images
El turismo espacial alguna vez pareció una idea para un futuro lejano, pero con el primer hotel espacial del mundo que se inaugurará en 2027 y compañías como SpaceX, Blue Origin y Virgin Galactic compitiendo para hacer que los viajes espaciales estén más disponibles, parece que el futuro es ahora.
Y todo empezó hace 20 años, cuando el millonario estadounidense Dennis Tito se convirtió en el primer turista espacial del mundo.
Dennis Tito se convirtió el 28 de abril de 2001 en el primer turista espacial al pagar 20 millones de dólares para volar con los rusos a la Estación Espacial Internacional (ISS). Estuvo atracado en la ISS durante 8 días y 20 años después, todavía considera que fue la mejor experiencia de su vida.
El 30 de abril de 2001, Tito, entonces de 60 años, logró lo que había sido un sueño de toda su vida cuando llegó a la Estación Espacial Internacional (ISS) en un cohete ruso Soyuz.
Aunque Tito trabajaba en finanzas cuando se puso en órbita, originalmente había comenzado su carrera en aeronáutica y astronáutica y mantuvo vivo su sueño de ir al espacio durante varias décadas. Para Tito, el espacio exterior era algo que lo fascinaba desde niño.
La NASA estaba en contra de la idea de enviar civiles al espacio, por lo que en 1991, Tito recurrió a la Unión Soviética y comenzó conversaciones sobre pagar para unirse a la misión espacial del país. Más tarde, en esa década, reanudó esas conversaciones antes de su eventual vuelo en 2001.
Finalmente, el 28 de abril de 2001, Tito emprendió su viaje a la ISS con dos cosmonautas rusos a su lado. Llegaron a la estación dos días después.
Aunque solo un puñado de otras personas ultra ricas han logrado pagar su entrada a una misión espacial desde que Tito allanó el camino por primera vez, está atento al desarrollo de la industria, con la esperanza de que más personas experimenten lo que él hizo.
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