Bombardeos golpean el este de Ucrania en medio de informes de que la ofensiva rusa enfrenta bajas y problemas logísticos, de suministro y de moral

Las fuerzas rusas lanzaron una serie de bombardeos de castigo en ciudades, pueblos y aldeas en el este de Ucrania, incluso cuando los oficiales militares y analistas occidentales y ucranianos dijeron que la ofensiva militar de Moscú en el corazón industrial del país estaba siendo frenada por bajas en las tropas y problemas de logística, suministro y baja moral.

Rusia reportó casi 400 ataques de artillería durante la noche y la madrugada del sábado, principalmente en la zona de batalla del este.

Describió los objetivos como militares, pero Ucrania dice que las áreas residenciales, incluida la ciudad nororiental de Járkov, están siendo devastadas.

Al mismo tiempo, el Kremlin redobló sus esfuerzos para culpar a Occidente por la devastadora guerra que ahora está en su tercer mes.

La invasión rusa ha matado a miles de personas, ha dejado franjas enteras de ciudades en ruinas y ha convertido a más de 5.4 millones de personas en refugiados.

El principal diplomático de Moscú, el ministro de Relaciones Exteriores Sergei Lavrov, dijo el sábado que una avalancha de armamento de los aliados de la OTAN estaba “inflando” la batalla.

Pero al mismo tiempo, en comentarios a los medios oficiales chinos que se informaron en el sitio web del ministerio, Lavrov insistió en que Washington y sus aliados europeos eran “absolutamente indiferentes” al destino de Ucrania.

El presidente Volodymyr Zelensky, en un video dirigido a la nación durante la noche, acusó a Rusia de tácticas de tierra arrasada en dos grandes provincias orientales conocidas juntas como Donbás, donde se concentra la lucha.

Moscú ya tenía un punto de apoyo en dos pequeños estados separatistas antes de la guerra, pero busca apoderarse de toda la región.

“Rusia quiere deshabitar esta área”, dijo Zelensky, citando “bombardeos constantes y brutales” contra la infraestructura y las áreas pobladas por civiles.

En ninguna parte es más claro, dijo el líder ucraniano, que en Mariúpol, la ciudad portuaria sitiada del sureste que describió como un “campo de concentración ruso” entre las ruinas.

El presidente ruso, Vladimir Putin, reclamó la victoria en Mariúpol hace más de una semana y dijo que las fuerzas de Moscú controlan la ciudad, mientras combatientes y civiles ucranianos siguen escondidos en un complejo siderúrgico gigante en condiciones cada vez más desesperadas.

Rusia está bloqueando y bombardeando el complejo en expansión, desde el cual se podía ver humo negro saliendo el sábado.

Los videos publicados desde el interior del laberinto de túneles y búnkeres debajo de la planta han mostrado a mujeres y ancianos enfermos y heridos, niños de aspecto angustiado y bebés que usan pañales hechos con bolsas de basura de plástico.

Las autoridades ucranianas estaban tratando de organizar evacuaciones de civiles el sábado desde Mariúpol y otras partes particularmente peligrosas de la zona de batalla, pero tales esfuerzos se han frustrado repetidamente y las tropas rusas han sido acusadas de disparar contra los que huían.

La administración civil-militar en el distrito oriental de Popasnyansky dijo el sábado que un día antes se había disparado contra autobuses llenos de evacuados. No hubo noticias inmediatas sobre las víctimas.

La última evaluación del conflicto por parte de la inteligencia militar británica, publicada el sábado temprano, describió a las fuerzas rusas enfrentando algunas de las mismas dificultades que llevaron a Moscú a romper un intento anterior de apoderarse de la capital, Kiev.

A pesar de los pasos de Rusia para mejorar sus perspectivas de campo de batalla en el este (reunir tropas y potencia de fuego, agilizar el mando, control y diseñar líneas de suministro más cortas), sus fuerzas aún enfrentan “desafíos considerables”, dijo la evaluación británica.

El comando militar ruso está fusionando y redistribuyendo “unidades dispares y agotadas de los avances fallidos” en el noreste del país, dijo el informe, y agregó que muchas de estas unidades probablemente sufrían de baja moral.

También citó un apoyo aéreo inconsistente y una “falta de habilidades a nivel de unidad”.

Otro nuevo análisis, del Instituto para el Estudio de la Guerra, con sede en Washington, o ISW, dijo que las fuerzas ucranianas estaban “frenando con éxito” los ataques rusos en el este de Ucrania.

Las fuerzas de Moscú hicieron avances limitados al oeste de la ciudad de Severodonetsk, según el análisis, pero permanecieron “estancadas” en un cuello de botella estratégico, al sur de la ciudad de Izyum.

Los analistas occidentales han sugerido que las tácticas ágiles en el campo de batalla podrían ayudar a los ucranianos a infligir pérdidas significativas a los rusos, como lo hicieron cuando Kiev estaba bajo amenaza.

Las líneas del frente son fluidas en algunos lugares, con las fuerzas ucranianas “realizando una maniobra de defensa en lugar de mantener posiciones estáticas”, dijo la evaluación de ISW.

Ninguna de las partes ha hecho una práctica de publicar regularmente información actualizada sobre las muertes en el campo de batalla.

Ucrania ha sido un poco más abierta, reconociendo un número significativo de muertos y heridos entre sus propias tropas. Sin embargo, el asesor de Zelensky, Oleksiy Arestovych, describió el viernes las pérdidas rusas como “colosales”.

En un aparente esfuerzo por evitar más pérdidas de tropas, Rusia ha estado apuntando fuego de artillería fulminante por todo el este.

En Moscú, el Ministerio de Defensa informó el sábado que alcanzó 389 objetivos, y dijo que incluían concentraciones de tropas, escondites de armas y depósitos de combustible.

Ucrania ha reconocido que los ataques a los depósitos de combustible y las refinerías están provocando una escasez de combustible.

Largas filas de autos y camiones se han ido formando en las gasolineras de varios puntos del país.

Zelensky dijo en su discurso nocturno que se esperaba que el aumento de los envíos de los aliados y otras medidas aliviaran la escasez en la próxima semana o dos, pero mientras tanto, los funcionarios ucranianos pidieron a los ciudadanos que eviten viajes innecesarios en vehículos privados. “Recuerden las necesidades del ejército”, exhortó un comunicado oficial del gobierno ucraniano en la aplicación de mensajería Telegram.

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