El Paso renuncia a declarar estado de emergencia migratoria a medida que se acerca el fin del Título 42

La ciudad y el condado de El Paso en Texas han optado por no declarar el estado de emergencia, todavía, mientras se apresuran a prepararse para la llegada de miles de inmigrantes antes del levantamiento del Título 42 el próximo lunes, por parte de la administración Biden.

“En realidad retrocedimos, el alcalde y yo retrocedimos”, dijo el juez del condado de El Paso, Ricardo Samaniego, al diario New York Post en una entrevista telefónica exclusiva.

“Nos retiramos porque descubrimos que hay muy poca diferencia entre los fondos que estamos recibiendo ahora y los fondos que obtendríamos si acudiéramos al gobernador y el gobernador se los enviara al presidente Biden”, explicó.

“En este momento podrían financiar el centro de procesamiento, pueden financiar a los voluntarios pagados”.

Los líderes locales han estado buscando establecer un refugio temporal o centro de procesamiento para migrantes después de que más de 100 fueran liberados en las calles del centro de El Paso el domingo después de que tanto el centro de procesamiento de la Patrulla Fronteriza como los refugios sin fines de lucro se quedaran sin espacio para albergarlos.

La ciudad de El Paso inicialmente le dijo al New York Post que declararía el estado de emergencia el miércoles por la noche, mientras que el condado de El Paso anunció públicamente que haría lo mismo el jueves por la mañana para ser elegible para recibir fondos adicionales para hacer frente a la crisis.

Después de reunirse con funcionarios federales, Samaniego le dijo al diario que había perdido el apetito por seguir adelante.

“Al principio nos hicieron creer que habría una gran diferencia (en el financiamiento), así que nos entusiasmamos con eso”, dijo. “Reunimos a todos y le preguntamos a FEMA: ‘Está bien, FEMA, ¿cuánto ganamos con esta declaración?’ Y respondieron: ‘Ahora está obteniendo la mayor parte de los fondos a través de fondos de emergencia y refugio'”.

El Paso, como la mayoría de las ciudades en la frontera, ya está viendo una oleada de inmigrantes y los funcionarios se están preparando para la posibilidad de que se vean abrumados si el Título 42 desaparece según lo planeado.

El Título 42 se refiere a una política de salud federal que se ha utilizado para evitar que casi 2 millones de inmigrantes ingresen al país debido a la pandemia de COVID-19.

Un juez federal de Louisiana podría decidir el viernes si levantará el Título 42, como quiere la Administración Biden, o se pondrá del lado de varios estados que han demandado para mantenerlo con el argumento de que serán invadidos por inmigrantes.

Hasta 7,000 personas que cruzan la frontera por día podrían venir a El Paso cuando se levante el Título 42, dijo Samaniego al New York Post.

El centro de procesamiento local de la Patrulla Fronteriza solo tiene capacidad para unas 4,200 personas y los refugios locales solo pueden manejar unos pocos cientos, según el día.

Samaniego anticipa que habrá críticas por su cambio radical, pero señaló que la ciudad y el condado siempre pueden presentar declaraciones de emergencia cuando el Título 42 se levante.

“Sé que la primera reacción será… piensan que tenemos la necesidad de asegurar las fronteras, aunque les explicaremos: ‘Es humanitario. Es para financiar’. No tuvo nada que ver con nuestra incapacidad para manejar cualquier situación, pero se malinterpretará y luego dirán que necesitamos la Guardia Nacional… todas estas otras cosas que pueden pasar con estas narrativas que están teniendo lugar”, dijo el juez del condado. “No valió la pena obtener tan poco y luego ponernos en un aprieto sobre cómo se interpretará porque tenemos una declaración de crisis de emergencia en nuestras manos”.

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