Madre del tirador en la escuela de Texas aseguró que su hijo “no era violento” y reveló el extraño regalo que le dio por cumplir 18 años
Adriana Reyes, madre de Salvador Ramos, el presunto asesino de 21 personas en la Escuela Primaria Robb, dijo que le regaló una tarjeta y un peluche de Snoopy en su cumpleaños 18 y aseguró que no era un joven violento
La madre del presunto tirador de la Escuela Primaria Robb reveló cómo era el carácter de su hijo de 18 años y el extraño regalo que recibió por su cumpleaños.
La última vez que Adriana Reyes habló con su hijo, Salvador Ramos, fue el pasado lunes, cuando le regaló una tarjeta y un peluche de Snoopy.
Dijo que estaba “sorprendida” de saber que su hijo estuvo involucrado en el horrible tiroteo en Uvalde, Texas, que se cobró la vida de 21 personas, incluidos 19 niños.
“Mi hijo no era una persona violenta. Estoy sorprendida por lo que hizo”, dijo al sitio Daily Mail.
“Rezo por esas familias. Estoy rezando por todos esos niños inocentes, sí, lo estoy. Ellos (los niños) no tuvieron parte en esto”.
Reyes está en el hospital, donde su madre, Celia González, de 66 años, se recupera después de que Ramos le disparara en la cara. La policía dice que luego se dirigió hacia la escuela primaria.
Dijo que no está segura de por qué Ramos atacó a su abuela, pero dijo que ella y sus hermanas seguirán cuidando a González hasta que pueda regresar a casa.
Reyes desmintió los rumores de que ella y su hijo tenían una relación tóxica y dijo: “Tenía una buena relación con él. Era reservado, no tenía muchos amigos”.
Mientras hablaba por teléfono con los periodistas, Reyes dijo más tarde que estaba “muy molesta por todo”.
Para su cumpleaños, Ramos compró dos rifles de asalto AR-15 y los presumió en las redes sociales. Su abuelo, Rolando Reyes, de 74 años, dijo que la familia no tenía idea de sus compras.
El abuelo de Ramos también dijo que su nieto era un “adolescente tranquilo” que a menudo pasaba tiempo solo en su dormitorio.
“No sabía que tenía armas. Si lo hubiera sabido, lo habría denunciado”, dijo Rolando Reyes a ABC News.
El abuelo de Ramos dijo que el año pasado, el adolescente “no fue a la escuela” y no se graduó.
“Intentarías decírselo, pero los niños de hoy en día creen que lo saben todo.
“Estaba muy callado, no hablaba mucho”, dijo Rolando Reyes.
Agregó que Ramos había venido a vivir con sus abuelos después de tener constantes discusiones con su madre.
Una excompañera de trabajo de Salvador Ramos describió al adolescente como un tipo “grosero, espeluznante y desaliñado”, y dijo que se mantuvo alejada de él porque se sentía insegura.
Grace Cruz, de 18 años, trabajaba con Ramos en un restaurante de comida rápida Wendy’s a pocos minutos de Robb Elementary, donde el martes, el joven de 18 años supuestamente se atrincheró en un salón de clases de cuarto grado y abrió fuego.
Cruz le dijo en exclusiva al sitio The US Sun que Ramos habló abiertamente sobre cómo estaba usando el dinero del trabajo para comprar armas y municiones, y de repente renunció semanas antes del tiroteo en la escuela después de ganar suficiente.
Se ha estimado que el adolescente habría gastado alrededor de $4,000 dólares en sus armas, municiones y chaleco estilo táctico.
Una de las armas que compró el pistolero fue una Daniel Defense de $1,870 dólares, por la cual, según los informes, envió un recibo a Yubo.
“Tenía problemas mentales, problemas emocionales, problemas personales, todo tipo de problemas”, dijo Cruz sobre Ramos.
“No olía, pero definitivamente estaba desaliñado. Algo andaba mal con él. No me sentía segura con él, así que siempre mantuve mi distancia a pesar de que trabajábamos las mismas horas”.
Cruz dijo que el adolescente trabajaba en el área de autoservicio, repartiendo pedidos a los clientes, pero que a menudo cometía errores y recibía quejas de los clientes.
“Renunció hace solo dos semanas, pero hubo un par de veces antes de eso en las que casi lo despiden por ser grosero”, agregó.
Cruz reveló que Ramos se jactó ante sus compañeros de trabajo sobre lo que pretendía hacer con los ingresos de su trabajo.
“Nos dijo que estaba ahorrando dinero para armas y municiones. Le preguntábamos: ‘¿Por qué gastarías tu dinero en eso? Gástalo en un auto o algo útil'”, dijo Cruz.
“Supongo que una vez que obtuvo suficiente dinero, renunció y dejó de aparecer”.
Los niños asesinados en el tiroteo tenían entre 10 y 11 años.
Hasta el momento, 17 de los 19 niños han sido identificados por sus seres queridos. Incluyen a los estudiantes Amerie Jo Garza, Xavier López, Uziyah García, Makenna Lee Elrod, Ellie García, Eliahana ‘Elijah Cruz’ Torres, Annabell Guadalupe Rodríguez, Tess Marie Mata, Lexi Rubio, Nevaeh Bravo, Rogelio Torres, Jayce Carmelo Luévanos, Jailah Nicole Silguero, Miranda Mathis, José Flores, Maite Yuleana y Alithia Ramírez.
Dos maestras que fueron asesinadas han sido identificadas como Eva Mireles e Irma García, quienes murieron mientras intentaban proteger a sus alumnos.
La abuela de Amerie, Berlinda Irene Arreola, le dijo al Daily Beast que, según los informes, el pistolero les dijo a los estudiantes que iban a morir.
Amerie fue asesinada a tiros cuando intentaba llamar al 911 y, según los informes, su mejor amiga quedó cubierta de sangre.
Arreola dijo: “Tenía su teléfono y llamó al 911, y en lugar de agarrarlo y romperlo o quitárselo, le disparó”. Agregó que Amerie murió como una heroína y que la niña acababa de recibir un premio por estar en el cuadro de honor A-B.
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