Asesinó a su esposa e hizo creer a todo que era inocente

En la víspera de Navidad de 2002, Laci embarazada había desaparecido de Modesto, California. El caso cautivó a millones en todo Estados Unidos y saturó la cobertura de los medios nacionales durante casi dos años.

Cuando se le preguntó inicialmente sobre el paradero de su esposa, Scortt Peterson afirmó que Laci había desaparecido en algún momento después de salir de la casa para pasear a su perro. 

Alrededor de un mes después, Amber Frey, una masajista de 28 años de Fresno, California, fue a la policía que había tenido una aventura con Scott Peterson, destrozando su imagen como esposo devoto de su hermosa esposa embarazada.

Mientras la policía continuaba buscando a Laci y las pistas que podrían explicar su desaparición, Scott Peterson vendió su vehículo deportivo, lo que generó sospechas de que podría estar tratando de deshacerse de la evidencia.

Los cuerpos de Laci y su bebé fueron encontrados en la orilla cerca del puerto deportivo, donde Scott Peterson guardaba su bote, el 13 y 14 de abril de 2003.

Una semana después, Scott Peterson fue acusado de dos cargos de asesinato en primer grado, con la especial circunstancia de doble homicidio, lo que abrió la puerta a que los fiscales buscaran la pena de muerte. 

Fue arrestado en San Diego con grandes cantidades de dinero en efectivo y el pasaporte de su hermano, y con un nuevo color y corte de cabello, aparentemente a punto de huir de la policía.

Poco después de declararse inocente de los cargos, Peterson contrató los servicios legales del famoso abogado Mark Geragos. 

Su juicio comenzó el 1 de junio de 2004, en el transcurso de las siguientes 19 semanas, los fiscales presentaron 174 testigos y cientos de pruebas diseñadas para pintar a Scott Peterson como un hombre frío y sin corazón que continuó mintiendo y engañando a su esposa, incluso cuando apareció en televisión fingiendo desesperación por su desaparición. 

Señalaron cómo se refería a sí mismo como un “viudo” incluso antes de que se encontrara el cuerpo de su esposa. Sin embargo, el caso de la acusación se vio obstaculizado por el hecho de que no tenían testigos presenciales del crimen y no habían encontrado un arma. 

Mientras tanto, Geragos trabajó para convencer al jurado de un escenario alternativo en el que otra persona había asesinado a Laci mientras paseaba al perro, luego incriminó a Scott después de enterarse de su coartada por las noticias. Peterson no subió al estrado.

Finalmente, el 12 de noviembre de 2004, luego de siete días de deliberación que involucraron el reemplazo de dos miembros del jurado, Scott Peterson fue condenado por el asesinato en primer grado de su esposa y el asesinato en segundo grado de su hijo por nacer. 

Se mostró impasible durante la lectura del veredicto, que fue recibido con vítores y celebraciones por los amigos de Laci en la audiencia y los cientos de simpatizantes que esperaban fuera del juzgado.

El 16 de marzo de 2005, Scott Peterson fue condenado formalmente a muerte por inyección letal. 

Su pena de muerte fue anulada en 2020, pero sigue encarcelado de por vida.

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