Padre de una de las víctimas de Uvalde, encarcelado por narcotráfico, no obtiene permiso para asistir al funeral de su hija

Al padre de una de las 19 víctimas asesinadas en la masacre escolar en Uvalde, Texas se le negó el permiso de libertad compasiva por parte de la prisión federal donde está recluido para asistir al funeral de su hija.

Eli Torres confirmó al diario Houston Chronicle que le negaron una licencia temporal para presentar sus últimos respetos a su hija Eliahna, de 10 años, a quien esperaba ver esta semana en una visita a prisión.

En cambio, solo se le permite ver una transmisión en vivo del servicio del jueves desde el interior de la prisión en Kentucky donde cumple 25 años por tráfico de drogas y conspiración.

“Los días y las noches están oscuros… No puedo ver ninguna luz”, dijo el otrora líder de pandilla sobre verse obligado a llorar solo mientras estaba tras las rejas.

Su caso ha sido retomado por activistas locales, y la representante del estado de Kentucky, Attica Scott, escribió el martes directamente al presidente Biden, rogándole que intervenga.

“Solo puedo imaginar la profundidad del vacío que dejarán las ausencias de estas víctimas en la vida de sus familias”, escribió Scott, suplicando a Biden que ayudara a “unir” a la familia en un momento de pérdida abrumadora.

El representante local insistió en que “el historial de rehabilitación y el comportamiento como recluso de Torres ameritarían” tal liberación temporal, sin dar más detalles.

Sin embargo, Torres, quien lideró una pandilla violenta apodada “The Texas Syndicate”, según muestran los registros judiciales, culpó sus propias elecciones de vida, que lo llevaron a pasar en prisión durante la mayor parte de la vida de su hija pequeña.

“Las decisiones que tomé me costaron”, dijo al Chronicle sobre las pandillas y el narcotráfico.

“Podría haber evitado que esto sucediera, de alguna manera, como padre… Podría haberlo detenido de alguna manera”, dijo.

En cambio, solo se quedó con noches de insomnio llenas de pesadillas sobre su hija, con quien dijo que hablaba regularmente desde la prisión y le envió su última carta días antes de que la mataran a tiros junto con 18 amigos de la escuela y dos maestros en la Escuela Primaria Robb.

El velorio de su hija está programado para comenzar el miércoles por la noche, con el funeral a las 11 a.m. del jueves.

“En el poco tiempo que vivió con nosotros, Eliahna logró tener un gran impacto en muchas vidas”, dice su obituario sobre la “maestra de las bromas” amante de Tik Tok.

“Era una persona amorosa y compasiva a la que le encantaba hacer el tonto. Tenía la sonrisa más hermosa que podía iluminar tu alma”.

La Oficina de Prisiones dijo que no podía comentar ni proporcionar detalles debido a “razones de privacidad y seguridad”.

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