Techos solares de Tesla se convierten en un dolor de cabeza para Elon Musk: Solo 23 unidades instaladas por semana en el último trimestre
Los números con respecto a las instalaciones semanales de techos solares por parte de Tesla no se acercan mínimamente al objetivo que estableció la compañía
Al escuchar el nombre de Tesla, lo primero que se le viene a la cabeza a las personas son vehículos eléctricos. La compañía norteamericana es conocida por su poderío en el mercado automotriz electrificado. Sin embargo, Elon Musk va mucho más allá de eso, pues la empresa también dedica parte de su tiempo y recursos en desarrollar y comercializar paneles solares.
Proporcionar energía a los Estados Unidos es uno de los tantos proyectos del sudafricano, donde se ha desarrollado una forma en que los paneles solares sean estéticamente agradables: incorporarlos directamente en los techos de los hogares en Norte América.
La división de energía de Tesla se encarga de este apartado, en conjunto con las baterías estacionarias para almacenamiento, donde los planes de Musk tienen estipulado hacer crecer esta parte de la empresa tanto como el apartado de los coches eléctricos, aunque para ello falta bastante recorrido, dado que de los $18,700 millones que obtuvo la empresa en ingresos, $616 correspondieron a este apartado.
Para se establecieron metas ambiciosas: instalar 1,000 techos solares por semana. Sin embargo, los números de Tesla no son tan amigables como parecen a pesar de haber registrado sus mejor trimestre en comparación con el año 2017.
Según apunta Electrek, la compañía dirigida por Elon Musk solamente pudo desplegar 2,5 MW de techos solares durante el segundo trimestre del 2022. Con una salida promedio de 8 kW, el recién mencionado medio afirma que esta cifra se traduce a unos 23 techos solares por semana.
El problema de estos números radica en que el CEO sudafricano había establecido una meta de instalar 1,000 techos solares a la semana, estando muy lejos de los objetivos marcados para la división de energía de Tesla que planea convertirse en un referente del sector.
De esta manera, un nuevo dolor de cabeza se suma a la lista de problemas de Musk, quien debe lidiar con los problemas económicos que atraviesan sus fábricas en Berlín y Texas, los despidos de cientos de empleados, además de la polémica que lo envuelve tras hacerse a un lado con respecto a la compra de la red social Twitter.
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