Con miedo o sin miedo, angelinos no dejarán de visitar Tijuana

Cuando María López se enteró de los reportes de incendios de vehículos y bloqueos en Tijuana, dijo que le daba miedo, pero eso no la detiene de viajar para allá tan pronto como la semana que entra. Ella y su esposo viven en Burbank, pero son propietarios y administradores de varios apartamentos de renta en las playas de Rosarito en Baja California.

“Me da miedo sobre todo porque los pequeños negocios apenas se están recuperando del impacto de la pandemia y estamos en una situación económica difícil”, dice.

“No es justo que vengan los narcos a sembrar el terror y que el gobierno mexicano no haga nada”.

Tras la ola de violencia que se ha desatado en las últimas horas en Tijuana, Rosarito, Ensenada y Tecate en Baja California, el gobierno de Estados Unidos, a través de su consulado pidió a sus empleados guardar refugio y evitar salir a la calle y transitar por zonas peligrosas.

El viernes 12 de noviembre se tuvieron reportes de quema de vehículos, narcobloqueos y el despliegue de una intensa actividad policial.

La alcaldesa de Tijuana, Monserrat Caballero Ramírez dio a conocer que al menos 10 vehículos fueron incendiados. La gobernadora de Baja California, María del Pilar Ávila Olvera dijo en Twitter que ante los hechos registrados, “quiero expresarles que mi Gobierno está actuando para proteger a la población y atender todos y cada uno de los eventos violentos que se han suscitado”.

Agregó en otro tuit que ya hay detenidos responsables de los hechos y pidió mantener la calma.

Se dio a conocer que están listos 2,000 policías y 3,000 elementos de la Guardia Nacional para resguardar el orden.

María dice que a pesar de la ola de violencia registrada en Tijuana, rechaza vivir con temor. “No quiero que afecte mi vida. Ya bastante tengo tratando de tranquilizar a mi nieto con las pesadillas que sufre por miedo a que haya un tiroteo aquí en su escuela en Los Ángeles. Y qué le dices a un niño. Cómo lo tranquilizas. Le tienes que decir la verdad”.

Esta angelina de origen mexicano comenta que justamente el viernes inició en Rosarito, el Baja Beach Fest 2022, un festival de reggaeton y música latina, que dura tres días y atrae a decenas de miles de turistas de todo el mundo. 

“No hay un lugar de renta disponible. Desde hace meses, se llenaron los hoteles. No creo que lo vayan a suspender porque significa una fuerte derrama económica para Rosarito”.

En comunicado, los organizadores del festival expresaron que están conscientes de los desafortunados eventos que han ocurrido en Tijuana, y a lo largo de México. “La seguridad es nuestra preocupación número uno cuando organizamos un evento de este tamaño”.

Agregaron que trabajan diligentemente con la Ciudad, el estado y los funcionarios estatales, y tienen conocimiento de que estos eventos han sido aislados y se han tomado todas las medidas de seguridad en las áreas alrededor de Baja para asegurar que los asistentes al festival tengan una experiencia segura y agradable.

“Como siempre, mantente atento de tus amigos, si ves alguna cosa, llama a las autoridades locales, y comunícate con nosotros por email al info@bajabeachfest.com”.

Hicieron ver que continuarán dando información actualizada si hay algún cambio. 

Mientras tanto, reportan que los hoteles están al 100% de ocupación y la zona se ha blindado en términos de seguridad. Al festival se espera la llegada de artistas como Maluma, Daddy Yankee, Wisin y Yandel.

Mónica Vallejo, quien tiene su casa en Tijuana pero cruza para trabajar en un tienda departamental en San Diego, pensaba que el BajaBeachFest podía suspenderse. 

“Lo que está ocurriendo es muy grave. Es preocupante ver como el narco quiere tomar el control y desestabilizar al país”.

Algunos días Mónica se queda en la casa de su hermana en San Diego para evitar las largas filas que se hacen en el cruce de la frontera. “Tengo miedo, no quiero ir a Tijuana. Supe que muchos pequeños negocios no abrieron. Ya de por sí es muy duro el cobro de piso de los narcos para quienes tienen un negocio; y los asaltos y el robo de vehículos están a la orden del día”.

Pero Marta Samano, una angelina que tiene una casa de renta en Airbnb en las playas de Rosarito, y pasa la mitad del mes entre Los Ángeles y Baja California, ve las cosas distintas y dice que ella no tiene ningún miedo.

“La violencia que ocurrió ayer en Tijuana y otros lados de la frontera en menor escala fue una reacción a las detenciones de miembros de un cartel que hizo el gobierno de México hace unos días”.

Dijo que ella apenas ayer regresó de Rosarito, y al comunicarse con sus vecinos para saber cómo estaban, se dio cuenta que no estaban ni enterados de los hechos violentos.

“Hace 5 años que invertimos en la compra de esa casa en Rosarito y nunca hemos experimentado ningún problema. Uno también tiene que aprender a cuidarse, estar atento y quedarse en casa cuando ocurre un hecho violento, como lo hacemos aquí en Los Ángeles donde hay tanta violencia como en el sur de la ciudad”.

Como empresaria, Marta dice que tiene mucha fe en México y en el presidente Andrés Manuel López Obrador. “México está en pleno desarrollo, y Estados Unidos lanza la voz de alerta cuando ocurre un hecho violento con los narcos, cuando ellos son los causantes principales de este problema tan grande con tanta compra de droga que aquí tienen”.

Marta esperaba que la violencia suscitada no afecte la asistencia al BajaBeachFest.