Los niños que desayunan en casa antes de ir a la escuela tienen mejor comportamiento, según estudio

Investigadores determinaron un vínculo entre la disminución del riesgo de problemas de comportamiento y el consumo de café, leche, té, chocolate, cacao, yogur, pan, tostadas, cereales y pasteles.

Los jóvenes que comen desayunos nutritivos en casa tienen una mejor salud psicosocial, según una investigación reciente publicada en Frontiers in Nutrition.

Aunque estudios anteriores han señalado la importancia de una comida saludable, este es el primer estudio que examina los impactos informados de si los niños desayunan, así como dónde y qué comen.

“Nuestros resultados sugieren que no solo es importante desayunar, sino también dónde desayunan los jóvenes y qué comen“, afirma el primer autor, el Dr. José Francisco López-Gil, de la Universidad de Castilla-La Mancha en Cuenca, España.

Explica que omitir el desayuno o desayunar fuera de casa está asociado con una mayor probabilidad de problemas psicosociales de comportamiento en niños y adolescentes.

De manera similar, el consumo de ciertos alimentos o bebidas se asocia con mayores (como carne procesada) o menores (como lácteos, cereales) probabilidades de problemas psicosociales de comportamiento.

Desayunar fuera de casa es casi igual a no hacerlo

Para este estudio, López-Gil y sus colegas analizaron datos de la Encuesta Nacional de Salud de España de 2017 en la que se incluyeron cuestionarios sobre las opciones de desayuno de los niños, así como sobre su salud psicosocial.

Allí también estaban inmersos aspectos como la autoestima, el estado de ánimo y la ansiedad. En la encuesta participaron 3.772 españoles de entre cuatro y catorce años, que fue respondida por los padres o tutores de los niños.

Entre los hallazgos más notables, López-Gil y sus colegas descubrieron que desayunar fuera de casa era casi tan malo como perdérselo por completo. Los autores especulan que esto podría deberse a que comer fuera suele ser menos saludable que comer en casa.

Los hallazgos también indicaron un vínculo entre la disminución del riesgo de problemas de comportamiento y el consumo de café, leche, té, chocolate, cacao, yogur, pan, tostadas, cereales y pasteles. Inesperadamente, se asociaron mayores posibilidades de estos problemas con el consumo de huevos, queso y jamón.

Aunque este estudio se limita a España, es probable que la disponibilidad de comidas saludables en las escuelas tenga un impacto en los resultados en ciertos lugares.

Sin embargo, otras variables, como el apoyo social y familiar que los jóvenes pueden recibir en casa durante el desayuno, también pueden desempeñar un papel en los beneficios informados.

“El hecho de que desayunar fuera de casa se asocie con mayores problemas de salud psicosocial es un aspecto novedoso de nuestro estudio”, apunta López-Gil. El objetivo de esta investigación es promover no solo el desayuno como parte de una rutina de estilo de vida saludable, sino también que se debe comer en casa.

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