Parque de Long Beach cuenta con un nuevo mural en honor a familia atropellada por conductor ebrio
El culpable ha sido sentenciado al igual que la cajera de una tienda que le vendió el alcohol
El parque Los Cerritos en Long Beach cuenta con un nuevo mural en honor a una familia que fue atropellada y muerta en el 2019, mientras celebraban la noche de Halloween.
De acuerdo a la policía Joseph Awaida, Raihan Dakhil y su hijo Omar, de 3 años, caminaban hacia su casa frente al parque cuando un conductor ebrio chocó contra ellos a una velocidad de 70 millas por hora.
El concejal del área Roberto Uranga trabajó con la familia Awaida, el Departamento de Parques, Recreación y Marina, el artista LaJon Miller y el Arts Council for Long Beach para crear el mural que fue pintado por voluntarios el pasado sábado 24 de septiembre.
El miércoles por la mañana, padres de familia jugaban con sus hijos en el área de juegos a unos metros de distancia del mural. Debido a que este se encuentra un poco alejado del área de juegos para niños, varios padres dijeron desconocer que había un nuevo mural.
Otros como Fortunato Cisneros si se intrigó por saber dónde estaba ya que dijo recordar el trágico accidente. En aquel tiempo su hijo Tito, con quien se encontraba ayer jugando en el parque, aun no nacía.
“Sí me acuerdo, pero no puedo creer que ya pasaron tres años, nos enteramos como uno o dos días después de Halloween”, dijo Cisneros, quien vive en el área.
El padre de familia dijo que, pese a que el parque está muy limpio y el área se ve muy tranquila, le ha tocado ver los fines de semana a conductores jóvenes que pasan a alta velocidad.
“Como estamos más alejados de la calle principal, casi no pasa la policía”, dijo Cisneros. “Pero aparte de eso aquí no se ve nada malo como gente haciendo drogas”.
A pocos metros de distancia se encontraba Edith Cruz junto a su hija. Ella dijo que, pese a vivir en el área desconocía lo que había sucedido en el parque hace tres años.
Indicó que no ha experimentado tragedias en el parque ni ha visto vehículos a alta velocidad. Ella asiste al parque principalmente en las mañanas.
“Es muy triste lo que le pasó a la familia”, dijo Cruz cuando se enteró de la razón del mural que se encontraba a sus espaldas.
Asesino arrepentido
El pasado 15 de septiembre, Carlo Adrián Navarro, el conductor de 23 años que atropelló a la familia mientras manejaba ebrio, recibió su sentencia de un mínimo de 25 años a cárcel de por vida. A principios del año, Navarro había sido declarado culpable de tres cargos, cada uno de asesinato y homicidio vehicular.
De acuerdo a las autoridades de Long Beach, el día del accidente Navarro, quien tenía 20 años en ese momento, decidió comprar alcohol al salir del trabajo. La cajera de la tienda Green Diamond Liquor, identificada como Amor Amacio, le vendió una botella de whisky Jack Daniels a sabiendas de que legalmente él era menor de la edad para consumir alcohol.
Aparentemente esta no había sido la primera vez ya que Navarro dijo durante su audiencia que había perdido la cuenta de cuantas veces le habían vendido alcohol en esa tienda siendo menor de edad.
Green Diamond Liquor perdió su licencia para vender alcohol y Amacio fue sentenciada a 364 días en custodia, cinco años de libertad condicional y 90 días de servicio comunitario. Adicionalmente, debió presentar una prueba de al menos $1 millón en seguro de responsabilidad civil para compensar a las víctimas.
Su hija, Synthyche Amacio, quien era la dueña de la licencia de Control de Bebidas Alcohólicas (ABC), recibió una sentencia de un año de libertad condicional y cinco días de servicio comunitario.
Ambas deben pagar $1,000 a una organización benéfica local seleccionada por la familia Awaida.
Navarro se disculpó con la familia de los fallecidos el día de su sentencia. También prometió involucrarse en temas que involucren la prevención de conductores ebrios y menores de edad.
De acuerdo al ABC, el consumo de alcohol por menores tiene numerosos efectos negativos y graves consecuencias, como fue el caso de Navarro.
La ABC indica que el consumo de alcohol en menores de edad no solo daña el desarrollo del cerebro, sino que también es ilegal y es el principal factor que contribuye a las colisiones de vehículos entre personas de 16 a 20 años.
En un esfuerzo por prevenir estos incidentes, el departamento de Control de Bebidas Alcohólicas de California ha implementado dos programas; el Minor Decoy y Shoulder-Tap. Ambos han ayudado a disminuir la accesibilidad de los menores para obtener alcohol tanto de locales autorizados como del público en general.
Adicionalmente, los agentes y/o representantes de licencias investigan las solicitudes de licencias para vender bebidas alcohólicas. Ellos también informan sobre el carácter moral y la idoneidad de los solicitantes y la idoneidad de los locales donde se realizarán las ventas.