Fiscales aseguran que García Luna seguía colaborando para el Cártel de Sinaloa tras su arresto
El exsecretario de Seguridad Pública de México habría facilitado las actividades de la organización criminal de 2001 hasta 2020
La sentencia en contra de Genaro García Luna se dará el 27 de junio. Crédito: Luis Acosta | AFP / Getty Images
Mientras la defensa de Genaro García Luna se prepara para el juicio en contra del exsecretario de Seguridad Pública de México, la Fiscalía del distrito Este de Nueva York hace lo propio y continúa presentando pruebas sobre las actividades criminales del exfuncionario.
En esta ocasión, los fiscales argumentaron que García Luna facilitó las actividades del Cártel de Sinaloa de 2001 hasta 2020, incluso tras haber dejado el cargo en 2012, y aún después de su arresto en 2019 en Dallas, Texas.
Esto, luego de que el exjefe de policía mintió sobre su participación en delitos relacionados al narcotráfico cuando solicitó la ciudadanía estadounidense, así como después de ser detenido, lo que demuestra que no había abandonado dichas actividades.
Otra de las bases de la Fiscalía para decir que García Luna siguió colaborando con el Cártel de Sinaloa, es una grabación de mediados de 2020 con un falso sicario de la mafia rusa, que se ha presentado como evidencia de que intentó deshacerse de testigos clave en el caso.
En el audio, García Luna supuestamente habla con un compañero de celda que lo espió a pedido de la Fiscalía sobre cómo “matar a las familias” de quienes colaboren con las autoridades.
Con ello, los fiscales sostienen que la conducta del acusado después de 2012 comprueba que “nunca abandonó la conspiración”.
Las autoridades estadounidenses aseguraron que tienen 15 testigos con experiencia en tareas de Seguridad y otros seis testimonios potenciales de testigos colaboradores para respaldar sus acusaciones.
Por su parte, los abogados de García Luna aseguraron que la acusación contra su cliente “es frágil”, ya que abandonó la vida pública al concluir el Gobierno de Felipe Calderón (2006-2012). Por ello mismo, pidieron que se desechen los cargos en su contra bajo el argumento de que ya han prescrito.
El juez Brian Cogan, el mismo que condenó al “Chapo” a cadena perpetua en 2019, podría ordenar una audiencia a mediados de noviembre para definir si procede el pedido de que se deseche el caso o no. En agosto pasado, y tras múltiples prórrogas, Cogan fijó el inicio del juicio para enero de 2023.
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