Talibanes azotan a 12 personas ante la multitud de un estadio en Afganistán
Mujeres y hombres recibieron latigazos tras ser acusados de cometer algunos delitos
Un combatiente talibán monta guardia mientras la gente pasa junto a él en un mercado Crédito: AAMIR QURESHI | AFP / Getty Images
Luego de regresar al poder en Afganistán en agosto del año pasado, tras la salida del ejército de Estados Unidos, el grupo extremista Talibán realizó una exhibición de castigo público en un estadio de ese país.
De acuerdo con la agencia AP, el pasado miércoles los talibanes azotaron a 12 personas en un estadio deportivo de una provincia del país asiático.
Este acto se une a la reanudación por parte del grupo extremista religioso de una forma brutal de castigo que fue una de los símbolos de identidad de su gobierno durante la década de 1990 y antes de la intervención de las fuerzas armadas de Estados Unidos.
El grupo de 12 personas castigadas ante una multitud estuvo conformado por tres mujeres y nueve hombres, quienes previamente habían sido detenidos por violar las normas del Talibán.
El castigo público se realizó estadio de la ciudad de Pul Alam en Logar, al sur de Kabul, al que fueron invitados los honorables eruditos, muyahidines, ancianos, líderes tribales y población local, por la oficina del gobernador de la provincia.
Según informó a la agencia un funcionario de la oficina del gobernador, los castigados recibieron entre 21 y 39 latigazos cada uno, tras ser condenados en un tribunal local por robo y adulterio, acciones con las que violaron la ley islámica o sharía.
“La sharía es la única solución a los problemas de Afganistán y debe aplicarse”, declaró el vicegobernador de Logar, Enayatullah Shuja, en un comunicado sobre los latigazos.
El regreso de los castigos públicos
El pasado sábado 19 de noviembre se registró la que es considerada la primera flagelación pública confirmada desde la toma del poder por los talibanes el año pasado y tuvo lugar en la provincia afgana de Tajar, donde 19 hombres y mujeres recibieron 39 latigazos cada uno por presuntos robos, adulterio y huida del hogar.
El castigo público busca servir de advertencia para los criminales y de lección para los culpables, según ha informado el Tribunal Supremo afgano.
Estos castigos se registran luego de que el líder de los talibán, el mulá Hebatulá Ajundzada, ordenó recientemente a los jueces de Afganistán que apliquen en su integridad la sharía contra quienes cometan una serie de delitos que podrían ser castigados incluso con amputaciones públicas o lapidaciones
Estos castigos, las ejecuciones públicas y las lapidaciones por supuestos delitos, fueron habituales durante el primer periodo de gobierno talibán, desde 1996 hasta 2001.
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